Solae expone los beneficios de la soja

En el marco del XV Congreso Latinoamericano de Nutrición, la compañía brindó a los participantes un Simposio acerca de los beneficios de la proteína de soya para promover la gestión del peso y la salud cardiovascular en individuos con diabetes tipo 2.

Durante el XV Congreso Latinoamericano de Nutrición, llevado a cabo en Santiago de Chile del 15 al 19 de noviembre, la compañía Solae expuso por medio de especialistas las propiedades de la soja en la lucha contra la diabetes y la obesidad.

La proteína de soja puede consumirse en todo el ciclo de la vida, ya que es baja en aceites y lípidos saturados. Según una serie de estudios, los grupos de personas que consumieron 20g de proteínas de soja demostraron un decrecimiento significativo de la grasa subcutánea y total abdominal. Si bien no se han hecho estudios en niños diabéticos, la soja es un buen candidato para la prevención y para una dieta saludable. Puede incluirse en la dieta de los niños, y la IDR se basará en el peso corporal. Una forma de introducirla es a través del desayuno o de las colaciones. El poroto de soja está constituido de la siguiente manera: 40% proteína, 15% azúcar y oligoelementos, 15% fibra alimentaria, 20% aceites y 10% de otros componentes.

La Dra. Ratna Mukherjea, líder en Ciencias Clínicas de la empresa, manifestó durante su ponencia: “Además de ser nutritiva, la proteína de soya, como parte de una dieta de gestión de peso, ayuda a reducir la acumulación de grasa y a incrementar la masa muscular magra. Brinda la sensación de satisfacción o saciedad porque posee un bajo índice glicémico y puede ayudar a modular las fluctuaciones de insulina, que son parcialmente responsables de aumentar el hambre a lo largo del día”.

El simposio puso énfasis en los beneficios de la soja para las personas que padecen diabetes. Un estudio publicado recientemente en The Journal of Nutrition, presentado en el Congreso por la Dra. Alison Duncan, profesora adjunta en el departamento de Salud Humana y Ciencias Nutricionales de la Universidad de Guelph, Canadá, confirmó los beneficios de la soya en la salud cardiovascular de adultos con diabetes tipo 2. La especialista sostuvo que “el objetivo de este estudio fue determinar el efecto de la proteína de soya sobre los niveles de lípidos en la sangre de adultos con diabetes tipo 2, con alimentación controlada”.

Una herramienta para la gestión del peso

Estudios recientes sobre la gestión del peso indican que el incremento de la ingesta de calorías derivadas de la proteína puede ser más benéfico que solamente una dieta con un contenido menor de calorías. Los investigadores han concluido que reemplazar la grasa y los carbohidratos por fuentes de proteína de bajo contendido graso saturado ayuda a promover la saciedad, aumenta la pérdida de grasa corporal y reduce la pérdida de masa magra.

La FDA aprobó la proclama de salud que afirma que la ingesta diaria de 25 gramos de proteína de soja como parte de una dieta con poca grasa saturada y poco colesterol puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas. En 2005, ANVISA aprobó la proclama de salud que afirma que 25 gramos de proteína de soya al día pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol. En Latinoamérica, además de Brasil, Chile y Colombia han aprobado proclamas de salud parecidas con relación a la ingesta de proteína de soya en la reducción de enfermedades cardíacas.

El papel de la soya en la salud cardiovascular de adultos con diabetes tipo 2

De acuerdo con la Federación Internacional de Diabetes, esta dolencia afecta a 246 millones de personas en el mundo y, de aquí al 2025, unos 380 millones de personas la padecerán. En un estudio presentado por la Dra. Duncan, después de la ingesta de proteína aislada de soya, los participantes (un total de 29) con diabetes tipo 2 y alimentación controlada tuvieron un colesterol LDL (malo) y una proporción LDL para HDL (bueno) menores.

Duncan también presentó los principales hallazgos de varios estudios científicos sobre cómo la soya contribuye a la salud de las personas que tienen diabetes mediante efectos benéficos sobre el control glucémico y la salud renal. Se comprobó que redujo la albúmina urinaria, los endpoints de enfermedades cerebro vasculares, y la proteinuria y el nitrógeno en la orina. Pudo reducir el avance de las complicaciones derivadas de la diabetes gracias a su contenido de péptidos bioactivos, aminoácidos y fibras. Otro de los descubrimientos indica que el pan de soja reduce el área debajo de la curva de la glucosa postprandial en comparación con el pan común.

La Dra. Duncan manifestó: “Debería implementarse un programa de educación para diabéticos. Según varias encuestas realizadas a consumidores, el 90% consume soja (44% semanalmente) y la mayoría eran intolerante a la lactosa o vegetarianos. Los alimentos preferidos fueron: tofu, bebidas y helados de soja. Pueden verse cuatro razones por las que las personas deciden consumir soja: por la buena salud general, por disfrute, para sustituir lácteos y para mantener una dieta baja en grasa. Las principales barreras para el consumo de soja tienen que ver con que los consumidores no están seguros sobre el modo de preparación, apariencia, sabor, textura y disponibilidad del ingrediente. El desafío es capturar grupos con diabetes y llevar a cabo estudios. Está probado que bajan los niveles de glucosa cuando se agrega soja a la dieta. También se recomienda para personas con prediabetes. No importa si padecen o no la enfermedad. El consumo de soja es una recomendación siempre”.