Actualmente existe un importante número de empaques plásticos que utilizamos para envasar alimentos. Muchos de ellos tienen como especie química pura el símbolo de reciclado que permite su rápida identificación en los sistemas de separación, recolección y reciclado.
Asimismo, existen materiales que no son barrera a los gases y aromas. Es por ello que se tienen que combinar en muchas aplicaciones. Sobre todo, para alimentos de vida útil larga con materiales plásticos que son barrera a los gases y aromas, estos son llamados materiales de alta barrera.
Sin embargo, la combinación de materiales es complicada para el reciclado, así que hay algunos materiales que, por sus propiedades como el PET, el polietileno, el latón, no sólo de gaseosas o bebidas no gasificada, aderezos, aceite o vinagre tiene una adecuada barrera a la pérdida del dióxido de carbono, por lo que se puede utilizar como material monocapa.
Los empaques plásticos reciclables y la forma de identificarlos
El reciclado varios materiales deberían ser marcados con el número 7. Si estamos en una combinación de polietileno con, por ejemplo, LBH una barrera muy importante a gases y aromas se debería usar el 7. También se utiliza para algún material que no sea especie pura del 1 al 6.
Si se está trabajando con poliamida sería necesario poner 7 o solo solo poliamida el 7 o solo con policarbonato el 7. Y las combinaciones de todos estos materiales también el 7. En ese sentido, se deberá tener en cuenta el primer concepto: vida útil larga de un alimento, que es la que requiere a veces del uso de laminadas o el uso de materiales de barrera o más de un material complica el reciclado.
De acuerdo con Alejandro Ariosti, director académico del posgrado en tecnología de envases y embalajes en el Instituto Argentino del Envase, dentro del webinar EXPO PACK Empaques reciclables, “el PET en cuanto gasificada es una buena barrera a la pérdida en el uso carbono y es monocapa. Con ello, facilita su reciclado y por eso es unos materiales que más recicla y es muy popular en las técnicas en todo el mundo para su reciclado con recuperación para grado alimentario”.
La permeabilidad en los envases
La permeabilidad a gases, aromas, vapor de agua puede entrar o salir hacia el interior o exterior del envase. Estas sustancias siempre se mueven desde donde su actividad química es mayor, a donde su actividad química es menor. En el caso de la permeabilidad, la actividad química se podría simplificar con ciertas oposiciones a las presiones parciales.
En dicha permeabilidad tratará de entrar oxígeno, por lo que podría perderse dióxido de carbono de un carbón atado de una de un producto carbonatada. Esa tendencia termodinámica no es posible modificarla, sólo modificar la cinética a la velocidad del fenómeno.
Las migraciones de los componentes
Otro fenómeno difusivo en las prácticas interesantes son las migraciones de componentes de los empaques plásticos, cabe señalar que todos los materiales del envase tienen migración de algunos de sus componentes. Por ejemplo, el papel, el cartón, el vidrio, la hojalata, el aluminio, en todos hay una interacción con distintos mecanismos llamada migración.
Aunque no exista contacto directo con el alimento es posible que existan ciertas sustancias que en fase gaseosa pueden mirar desde la tapa plástica o desde el cuerpo el envase al producto. Estos fenómenos discursivos en los plásticos, la permeabilidad a la migración y la absorción, se evalúan y son útiles para determinar, por ejemplo, o tener una idea de la vida útil de los alimentos que envasados.
“Así que los conceptos de aptitud sanitaria se aplican hoy en el mundo a otros materiales que están en contacto con los alimentos y que no son envases, pueden ser superficies de contacto con los alimentos en la industria alimentaria, sorbetes para tomar un jugo, cucharitas, vajilla plástica o de otros materiales”, concluyó Ariosti.
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