En América Latina 4.5 millones de niños y niñas menores a cinco años padecen retraso en su crecimiento por desnutrición, según apuntan datos obtenidos en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) realizada en el año 2020.
Aunado a esto, la Organización de las Naciones Unidas dio a conocer un informe en el que se expuso que el 11% de los niños menores de cinco años presentan desnutrición infantil crónica en América Latina y el Caribe.
En países como Guatemala, por ejemplo, 1 de cada 2 niñas y niños padecen desnutrición; mientras que, en México, hay 1.5 millones de niños que no tienen acceso suficiente a alimentos.
Estas cifras nos recuerdan que, si bien la desnutrición infantil es un problema complejo cuya solución depende de la colaboración de distintos niveles, también es mucho lo que podemos hacer para cambiar la situación actual de tantos niños y niñas de la región.
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Un plan de acción contra la desnutrición infantil
Ante las cifras presentadas, Quaker México encontró motivación suficiente para crear la iniciativa Quaker Qrece, una intervención integral y multisectorial que busca contribuir a combatir la desnutrición infantil (leve y moderada) de niños y niñas menores de cinco años en México y Guatemala.
La forma en que opera este proyecto es:
- A través de un alimento especializado a base de avena que cuenta con 17 vitaminas y minerales que son esenciales en la alimentación de poblaciones infantiles con alta prevalencia de desnutrición.
- La efectividad de este alimento ha sido comprobada a través de diversos estudios clínicos.
- Al día de hoy, esta iniciativa ha beneficiado a más de 17 mil niñas y niños en ambos países; la meta es alcanzar a 35 mil niños para 2025.
Claro está, que lo anterior va acompañado de una intervención integral de la mano de socios como: Un Kilo de Ayuda en México y CARE Guatemala.
Así, la compañía ha brindado acompañamiento periódico para monitorear de manera cercana el progreso de los niños durante y después del programa.
Asimismo, el conocimiento sobre el valor de abordar estos temas desde un enfoque multidisciplinario ha incentivado el deseo de brindar capacitaciones a madres y padres de familia sobre aspectos relevantes en temas de salud, higiene y nutrición, con la finalidad de mejorar los hábitos alimenticios en los hogares.
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Las consecuencias de la desnutrición infantil
Además de que la desnutrición trae consigo limitaciones en el desarrollo de las capacidades físicas y motrices de niños y niñas, también deriva en un bajo desempeño durante la etapa de aprendizaje de habilidades:
- Cognitivas
- Sociales
- Emocionales
Por lo tanto, genera un bajo desempeño escolar y limita la productividad laboral en la edad adulta. Estos son sólo algunos de los retos a vencer que el Banco Mundial ha detectado para impedir que una nutrición deficiente durante la infancia genere un impacto negativo a lo largo de los años.
El programa Quaker Qrece ha impactado indirectamente a más de 50 mil personas que viven en comunidades vulnerables gracias al trabajo comunitario de sus socios ejecutores.
En una región como América Latina en donde es indispensable continuar detonando e impulsando el desarrollo, hoy se tiene la oportunidad de poner un “granito de avena” para mejorar su futuro.