En el marco del evento Supply Chain USA 2025, Jen Ehresmann, vicepresidenta de cadena de suministro de Hormel Foods, abordó los principales desafíos y oportunidades que enfrenta la industria alimentaria en un escenario post-pandemia, con consumidores más conscientes, exigentes y conectados, la cadena de suministro ya no solo debe ser eficiente: debe ser resiliente, inteligente y sostenible.
Hormel Foods, reconocida por marcas como SPAM, Applegate y Jennie-O, enfrenta un entorno donde la trazabilidad, la velocidad y la transparencia son tan importantes como el sabor.
La intervención de Ehresmann puso sobre la mesa cómo una cadena alimentaria moderna necesita tecnología avanzada, un enfoque proactivo en datos y una cultura organizacional preparada para el cambio.
Transformación digital en la industria alimentaria: del campo al anaquel
Ehresmann explicó cómo la compañía ha adoptado modelos de inteligencia artificial para predecir la demanda con base en señales de consumo, clima, estacionalidad y promociones. Este enfoque les permite ajustar la producción en tiempo real y reducir tanto el desperdicio como los costos de almacenamiento.
La inteligencia predictiva nos permite fabricar lo que realmente se va a consumir, no lo que creemos que se venderá"
Señaló la ejecutiva.
Automatización y eficiencia operativa
La compañía ha invertido en automatización tanto en plantas de producción como en centros de distribución.
Robots colaborativos (cobots), sistemas de paletizado automatizado y vehículos autónomos permiten a Hormel aumentar la eficiencia sin comprometer la seguridad alimentaria.
Además, la digitalización de los procesos de picking y trazabilidad mediante escaneo y RFID ha mejorado la visibilidad en toda la cadena: desde el origen del insumo hasta la góndola del supermercado.
Cambio cultural y sostenibilidad en la cadena de valor
Uno de los ejes clave abordados por Ehresmann fue la importancia de formar a los colaboradores para operar en entornos altamente automatizados.
La empresa ha desarrollado programas de upskilling y reskilling orientados a técnicos, operarios y líderes de planta, con foco en analítica, seguridad alimentaria avanzada y gestión de datos en tiempo real.
Economía circular y transparencia
Hormel también ha rediseñado parte de su cadena de valor para incorporar principios de sostenibilidad: desde el uso de empaques reciclables y energía renovable hasta acuerdos con productores primarios para implementar prácticas regenerativas.
Esta trazabilidad extendida permite no solo cumplir con regulaciones, sino también responder a la creciente demanda de los consumidores por saber de dónde proviene su alimento y cómo fue producido.
La hoja de ruta de Hormel para el futuro alimentario
La ponencia de Jen Ehresmann dejó en claro que la cadena de suministro alimentaria enfrenta un punto de inflexión.
Para avanzar, las empresas deben integrar tecnología con cultura organizacional y una visión centrada en el consumidor.
La experiencia de la empresa ofrece una hoja de ruta clara para los actores de la industria que deseen evolucionar:
- Usar datos predictivos para fabricar solo lo necesario.
- Automatizar sin perder el control sobre la inocuidad.
- Formar equipos humanos capaces de operar tecnologías avanzadas.
- Garantizar transparencia en toda la cadena de valor.
En una industria donde cada eslabón cuenta, la compañía demuestra que es posible innovar sin comprometer la calidad, ni la confianza del consumidor.
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