La crisis alimentaria podría empeorar para 2023, reveló el PMA

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA) emitieron una seria advertencia sobre la crisis alimentaria inminente, impulsada por los conflictos, los choques climáticos y los efectos de la pandemia.

La PMA alertó que el 2023 podría ser incluso, peor que los eventos paralizantes de 2022, subrayados por los precios de los alimentos que son extremadamente altos.

Hay comida disponible, pero los precios son realmente altos. Si embargo, si no podemos lidiar con ciertas cosas como la poca disponibilidad de fertilizantes a precios accesibles, entonces esta crisis se convertirá en una crisis de disponibilidad el próximo año”, comentó el economista jefe del PMA, Arif Husain.

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Cómo la inflación influye en la creciente crisis alimentaria

Husain admitió que, si bien los precios de los productos alimenticios están disminuyendo, esto no es suficiente para reducir el efecto de la inflación en los alimentos.

Millones de personas siguen paralizadas por la combinación de la caída de las economías y alta inflación de los productos de consumo.

Asimismo, el informe advirtió que la guerra en Ucrania ha exacerbado el ya constante aumento de los precios de los alimentos y la energía en todo el mundo, que ya está afectando la estabilidad económica en todas las regiones.

Por su parte, el economista del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), Matt MacLachlan también advirtió que la inflación máxima de los alimentos aún no está aquí, ya que los precios descontrolados de los alimentos manchan las cifras de inflación de muchos países.

• Tal es el ejemplo de Alemania, donde la inflación alcanzó el 16.6% interanual este agosto, muy por encima de la tasa general de inflación del 7.9%.
• Los costos de los alimentos en la Unión Europea (UE) aumentaron hasta el 12.8% en julio, en comparación con el año pasado.
• Del mismo modo, en los Estados Unidos la inflación de los alimentos es más alta que el número de inflación general (10.9% en comparación con el 8.5% en julio).

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