De acuerdo con un reciente informe del Instituto de Medio Ambiente de Estocolmo (SEI), los fenómenos meteorológicos extremos y las crecientes tensiones geopolíticas han aumentado las preocupaciones sobre la seguridad alimentaria en medio de las interrupciones de las cadenas de suministro mundiales de alimentos y bebidas.
Las prácticas agrícolas resilientes al clima a escala local, nacional y regional garantizan un suministro interno de alimentos suficiente y estable y reducen la dependencia de los mercados mundiales de alimentos. Mitigando los efectos transfronterizos de los impactos climáticos y la agitación geopolítica en la seguridad alimentaria.
El SEI y el programa de investigación Mistra Geopolitics sugieren que la adopción de prácticas agrícolas resilientes al clima, la mejora de la producción nacional de alimentos, el enfoque en la adopción de dietas basadas en plantas y la reducción del desperdicio de alimentos pueden ayudar a reducir la dependencia de los mercados internacionales de alimentos.
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Las empresas alimentarias deben impulsar las prácticas agrícolas
El informe pide un "cambio de paradigma" que se aleje de las prácticas ecológicamente dañinas. Sugiere que, para facilitar este cambio, las empresas de alimentos y bebidas pueden financiar la investigación agrícola para impulsar la adopción de prácticas agrícolas resistentes al clima, guiar la diversificación de cultivos y optimizar los rendimientos y la eficiencia en el uso de los recursos.
Investigaciones recientes realizadas por expertos en economía han confirmado que la producción de alimentos seguirá enfrentando desafíos de sostenibilidad y asequibilidad, a pesar de que la producción agrícola continuó creciendo aproximadamente al mismo ritmo en las últimas seis décadas.
Además, los estrictos controles fronterizos en diferentes regiones plantean dificultades significativas para el comercio transfronterizo de alimentos, ya que alrededor de una cuarta parte de la producción mundial de alimentos pasa por puestos de control internacionales.
El SEI hace hincapié en la cooperación plurilateral como vital para hacer frente a los riesgos transfronterizos de seguridad alimentaria en medio de estas dificultades.
El informe de SEI cita investigaciones que indican que reducir el desperdicio de alimentos en todas las etapas de la cadena de suministro también puede conducir a ganancias en la disponibilidad y seguridad de los alimentos, al tiempo que aborda las pérdidas ambientales.
Para las empresas, reducir la pérdida de alimentos en todas las etapas de la cadena de suministro puede mejorar significativamente la disponibilidad de alimentos y la eficiencia de los recursos, señala el estudio.
Inspirando los productos plant-based
La innovación en el espacio basado en plantas está aumentando a medida que aumenta la curiosidad de los consumidores sobre la fuente de sus alimentos y la huella ambiental y nutricional. Si bien las dietas basadas en plantas ofrecen una alternativa más ecológica que la carne cultivada convencionalmente, persisten los desafíos.
Según el informe, estos incluyen:
- la superación de las preferencias y normas alimentarias socioculturales
- la garantía de la accesibilidad económica
- la mejora de la disponibilidad de opciones basadas en plantas
- las consideraciones de equidad para los medios de vida de las pequeñas explotaciones
Las empresas que desempeñen un papel activo en la transición a las dietas basadas en plantas creando conciencia sobre los beneficios para la salud y el medio ambiente, ofreciendo alternativas asequibles a base de plantas e invirtiendo en investigación sobre alimentos alternativos y dietas sostenibles.
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