La imagen de una compañía en el mercado depende en gran medida de la manera en que sus productos son vistos por los consumidores. Por ello no sólo alcanza con ofrecer productos de la mejor calidad, sino que es absolutamente necesario desarrollar en ellos una gráfica que exprese la profesionalidad de la empresa.
En este sentido, las grandes marcas reconocen que las etiquetas son piezas fundamentales de la identidad corporativa de una compañía y generan una ventaja competitiva.
Una de las técnicas más utilizadas especialmente en el mercado de vinos y espumantes, es la técnica de embossing. La misma consiste en dar relieve a las etiquetas autoadhesivas con el fin de obtener un diseño de mayor profundidad y dimensión que genere mayor impacto en el consumidor.
El proceso consiste en realzar el diseño o imagen por encima de la superficie de la etiqueta. Aunque en este proceso no se utiliza tinta la banda puede estar previamente impresa.
Hay dos tipos de procesos, uno de ellos es el relieve tradicional y el otro el bajo relieve;
relieve tradicional o embossing convencional
En este tipo de relieve, en el cual la fibra de papel es deformada para generar el relieve convexo, entre el frontal y la botella se sitúa aire. Cuando el aire toma contacto con humedad, como puede ser en test frappé o de heladera, las exigencias sobre el frontal y adhesivo son máximas. Con las precauciones adecuadas, los adhesivos evitarán una deformación de la etiqueta, logrando mantener el diseño y la adhesión de la misma sobre la botella.
Bajo relieve
En este tipo de relieve, en el cual la fibra de papel es deformada para generar el relieve cóncavo, se generan dos sectores en los que se deposita aire. Esto, en conjunto con el sector con bajo relieve, genera una mayor superficie de alta exigencia para el frontal y el adhesivo. (Al igual que en el relieve tradicional, cuando el aire atrapado entre la etiqueta y la botella, toma contacto con humedad, o es sometido a Shock térmicos constantemente, las exigencias máximas, siendo este tipo de embossing más sensible a adquirir defectos en la imagen de la etiqueta por deformaciones.)
Recomendaciones generales
La técnica de embossing surge como una opción súper interesante para darle a las etiquetas un acabado excepcional; sin embargo, para garantizar los buenos resultados de esta técnica son necesarias algunas recomendaciones como:
• Zona de contacto o reserva de embossing. Siempre es recomendable mantener entre el borde de la etiqueta y el embossing al menos 5 mm sin relieve.
• Minimizar la superficie de embossing.
• Maximizar la zona entre un relieve y otro.
• El desempeño de la etiqueta autoadhesiva será menor en el caso de aplicar un embossing profundo