La industria mexicana hizo un llamado a la autoridad federal para sumarse a la discusión que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) tuvo el 22 de agosto sobre la modificación del etiquetado actual de alimentos y bebidas no alcohólicas.
El pasado 22 de agosto, el máximo tribunal de la nación, discutió y analizó el amparo en revisión 240/2018 que presentó El Poder del Consumidor (EPC) en 2015, de manera posterior a la implementación, en 2014, del etiquetado frontal obligatorio de alimentos y bebidas.
Raúl Riquelme Cacho, presidente de la Comisión de Salud de la Confederación de Cámaras Industriales (CONCAMIN), declaró en comunicado que incorporado a ese proceso judicial, se requiere un diálogo abierto que proporcione más y mejor información al consumidor.
En 2016 un juez de distrito resolvió que el etiquetado frontal mexicano viola el derecho a la salud y a la información de los consumidores, pero la COFEPRIS y la PROFECO apelaron frente a un Tribunal Colegiado de Circuito en 2017.
El Tribunal decidió que, debido a la importancia y trascendencia del caso, debería ser la Suprema Corte quien lo resolviera. El ministro Fernando Franco presentó un proyecto donde se respalda la sentencia del juez, de acuerdo con un comunicado de El Poder del Consumidor. De acuerdo con el amparo, el etiquetado implementado por la Cofepris no fue consultado con institutos nacionales de salud, la academia, organismos internacionales ni con organizaciones de la sociedad civil. Tampoco es comprensible para la población mexicana.
Señala también que tiene criterios nutrimentales no sustentados en la ciencia y presenta un criterio de azúcar que induce a confusión y a un alto consumo de este ingrediente. Por todo ello, no cumple con las recomendaciones internacionales de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ni con la Estrategia Naciónal para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes.
"En caso de obtener una resolución favorable, los efectos de la resolución de la Corte serían aquellos que fijó el Juez de Distrito en su sentencia, es decir, que el etiquetado se adecúe a los parámetros desarrollados por la OMS y en la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, la Obesidad y la Diabetes de 2013", explica El Poder del Consumidor.
El presidente de la Comisión de Salud de la CONCAMIN señaló sobre este tema que los "industriales de México buscamos un trabajo conjunto e informado en beneficio de la salud pública de todos los mexicanos". Apuntó que el organismo mantiene su compromiso con la legalidad, transparencia y derechos de los consumidores a acceder información clara, veraz y precisa, apegada a los más altos estándares internacionales sobre el contenido nutrimental de alimentos y bebidas no alcohólicas que sus asociados producen.
"Los industriales nos pronunciamos en favor de la seguridad alimentaria de los mexicanos, defendemos sus intereses en las diferentes medidas regulatorias internacionales y creamos opciones más saludables para el consumidor", finalizó.
Fuente: Industria Alimenticia
