Recicladores de Peñalolén, Quinta Normal, Santiago y Recoleta se capacitan para mejorar su inclusión y gestión asociativa.
Para que el reciclaje de base se convierta en un oficio formal, organizado y reconocido, un conjunto de recicladores de la Región Metropolitana dieron el vamos este lunes al Programa de fortalecimiento, liderazgo y desarrollo personal. La iniciativa se desarrolla en el marco del proyecto Reciclaje Inclusivo Comunal (RIC), ejecutado por Fundación Casa de la Paz y el Movimiento Nacional de Recicladores de Chile (MNRCH), en conjunto con las municipalidades de Peñalolén, Quinta Normal, Santiago y Recoleta.
En Chile hoy se contabilizan a cerca de 60.000 hombres y mujeres dedicados a reciclar materiales como cartón, plásticos y botellas, entre otros, quienes enfrentan condiciones de vulnerabilidad y perciben bajos ingresos. Ellos recolectan cerca del 70% de los residuos sólidos municipales que llegan a las plantas de reciclaje, de acuerdo a la organización que los agrupa. De ahí que rol de cara a cuidado del medio ambiente y la sociedad no sea menor.
Para Carolina Carrasco, representante del Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del BID en Chile, el desarrollo de habilidades laborales y personales es fundamental en la generación de mayores y mejores condiciones de inclusión de este importante sector de la población, que muchas veces desarrolla su labor de manera poco visible para el resto de la sociedad, sin que se ponga en valor el aporte realizado por los recicladores al cuidado del medio ambiente y la oportunidad de mercado existente en torno a una gestión de residuos inclusiva.
La serie de talleres -dictados por el Centro Internacional de Economía Social y Cooperativa, de la Universidad de Santiago de Chile, partió con una jornada de encuentro e intercambio entre los recicladores de base, cuyo objetivo fue relevar el valor de su oficio en la sociedad y la importancia de formarse en habilidades de gestión y fortalecimiento de su capacidad de asociación. Ambas, herramientas clave para mejorar sus condiciones laborales y administrar exitosamente sistemas de gestión de reciclaje inclusivo.
Esta es una oportunidad que nos permitirá profesionalizar nuestro trabajo y que finalmente dignifique nuestra labor y contribución que hacemos a la sociedad para ser respetados por todos, manifestó Gipsy Rubilar, recicladora participante.
Además, en los talleres aprenderán habilidades blandas, trabajo en equipo, liderazgo, y conformación y coordinación de una organización. Una vez que terminen el ciclo y sean evaluados en estos conocimientos recibirán un certificado de acreditación de sus competencias. En una siguiente etapa recibirán formación en materias de gestión del negocio del reciclaje.
Con esta actividad buscamos ir abriendo espacios de participación de los recicladores, que permitan visibilizar y dignificar la importante labor que realizan. Queremos cambiar los prejuicios que gran parte de la sociedad tiene con las personas que trabajan en la calle y viven de lo que otros desechan. Queremos aportar a la generación de competencias en los recicladores, que faciliten su inclusión en la cadena de valor del reciclaje explicó Pablo Valenzuela, Director Ejecutivo de Fundación Casa de la Paz.
Una iniciativa de alcance regional
A nivel regional vale destacar la Iniciativa Regional para el Reciclaje Inclusivo (IRR), programa iniciado en 2011 por el FOMIN y la División de Agua y Saneamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Fundación Avina, la Red Latinoamericana de Recicladores (Red-LACRE) y Coca-Cola América Latina con el objetivo de fomentar la integración de los recicladores informales de reciclables en Latinoamérica y el Caribe al mercado formal del reciclaje.
En el marco de la IRR, en Chile se desarrolla el proyecto de Reciclaje Inclusivo Comunal, con la participación de Fundación Avina, y de aliados estratégicos del sector privado Coca Cola, Gerdau Aza, Pepsico, BASF, Tetra Pak, y del sector público como las municipalidades de Peñalolén, Santiago, Recoleta y Quinta Normal.
Además el proyecto cuenta con el patrocinio del Ministerio de Medio Ambiente y se desarrolla en el marco del programa Santiago Recicla que lidera la Seremi de Medio Ambiente.
En tanto a nivel del Parlamento se está discutiendo la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que obliga las empresas a hacerse cargo de los residuos y desechos generados de su dependencia, e involucra directamente a los recicladores en su rol de gestores de residuos. La ley REP es una oportunidad para visibilizar y formalizar la actividad desarrollada por los recicladores de base.
Fuente : El Dínamo