Al compromiso de McDonalds se sumarán KFC, Burger King y Pizza Hut, en un intento del gobierno británico por combatir la obesidad
Como parte del "acuerdo de responsabilidad" del gobierno británico con la salud pública (destinado a involucrar a la industria alimentaria en la lucha contra los problemas de salud, como la obesidad), McDonald informará, a partir de esta semana, sobre el contenido energético de todos los productos en sus menús en Gran Bretaña. El portal 'Guardian.co.uk' presentó esta información que muchos miran con escepticismo.
En la calle Canon St., del centro de Londres, donde se iniciaron los esfuerzos informativos de McDonalds con anterioridad al resto del país, una lista completa enseña el rango calórico de los productos, desde una botella de agua mineral (calorías: 0) a un ShareBox de 20 piezas de McNuggets de pollo (835 calorías).
La mayoría de los clientes acogió favorablemente la iniciativa. Un consumidor entrevistado por el medio señaló que la medida trajo "claridad" a las opciones de su hora de comer: "Es bueno ver cuántas calorías estoy ingiriendo"; sin embargo, agregó: "Creo que la gente sabe lo que McDonald es... y no creo que vaya a cambiarlo".
La suposición de que los consumidores, a pesar de tener la verdad al desnudo al momento de la compra, acabarían pidiendo exactamente lo que habían pensado cuando entraron, coincide con los resultados de la investigación llevada a cabo por la propia empresa en 2000 de sus clientes. Según este estudio, menos de uno de cada cinco de los consumidores (17%) dijeron que la cantidad de calorías les hacían pensar más sobre lo que estaban comiendo.
El Departamento de Salud cree que el uso de un etiquetado más claro podría ayudar a combatir la obesidad de los ciudadanos, animándolos a comprar los alimentos más saludables. Junto con McDonald, cadenas como KFC, Burger King y Pizza Hut se han sumado a la promesa de etiquetado y el Departamento espera que más de 5.000 puntos de venta de las calles más concurridas, informarán sobre el contenido calórico de sus alimentos para finales de este año.
Sin embargo, muchos se muestran escépticos respecto de la eficacia del etiquetado de calorías. Paul Gately, profesor de ejercicio y obesidad en la Leeds Metropolitan University y asesor de McDonald, dijo: "No se puede negar el impacto positivo de ofrecer a los consumidores información y la posibilidad de tomar una elección informada". Sin embargo, no hay datos para demostrar que ello se pueda traducir en un gran impacto en la salud: "Este tipo de métodos de 'empujón' no combate la obesidad real", indicó.