El Instituto Nacional de Estadística y Geografía dio a conocer que en México se separa a diario 11% de la basura recolectada; 46 de cada 100 hogares separan la basura.
Los estados que más sobresalen por separar los desechos son: Querétaro, Jalisco, Nuevo León, Distrito Federal y Estado de México. Según el Inegi, a nivel nacional hay 241 centros de acopio que recolectan cada día materiales diversos, cuyo 75 por ciento es papel, cartón, PET y vidrio, los cuales se reciclan.
Sólo el 13% del vidrio es reciclado.
El vidrio es un material ideal para ser reciclado, pues puede ser reutilizado en un 100 por ciento una cantidad indefinida de veces. El uso de vidrio reciclado ayuda a ahorrar energía, es menos costoso, además de reducir residuos y el consumo de materias primas. El vidrio se puede utilizar para hacer vajillas, ladrillos, cerámicas, asfaltos, etcétera. Cada tonelada de desechos de vidrio que se recicla evita que 315 kilogramos de dióxido de carbono se liberen.
El 97% del aluminio se desaprovecha
El reciclaje del aluminio generalmente produce unos ahorros importantes en materia económica y energética aun cuando se tienen en cuenta los costes de recogida, separación y reciclaje. El aluminio se recicla de latas, cables, embalajes, muebles o perfiles de construcción. Al reciclarse se puede transformar en fuselajes de avión, coches, planchas para imprimir periódicos, marcos de ventana, productos de cosmética o latas.
El 39% del cartón se recicla
Es importante reciclar cartón, ya que aproximadamente por cada tonelada de cartón reciclado se ahorran 140 litros de petróleo, 50 mil litros de agua, dos metros cúbicos de espacio en un vertedero y 900 kilos de dióxido de carbono frente a un cartón obtenido de materias primas. Algunos tipos de cartón son usados para fabricar embalajes y envases, básicamente cajas de diversos tipos. En Los Mochis compran el kilo de cartón a 70 centavos.
Se recicla el 7% del plástico
Los plásticos representan más del 12% de la cantidad de residuos sólidos urbanos. Los envases de gaseosa, agua mineral, jugos y aceite comestible pueden convertirse en filamento para alfombras y vestimenta. Los envases de leche y champú se convierten en otros envases. Las tuberías de agua, mangueras y cables se transforman en suelas de zapatos, caños, etcétera. En Los Mochis existen alrededor de 30 centros de acopio que los envían a recicladoras del país.
Fuente: OEM