Internacional.- La idea original de hace 30 años, fue del empresario canadiense Joel Paglione, se trata de una botella multiuso de roble que supuestamente es capaz de ofrecer una crianza rápida a los vinos en el propio envase desde el primer día.
"Oak Bottle", como se denomina, fue creada a través de fuentes sostenibles de roble americano, la botella también se puede utilizar para mejorar la crianza de destilados como whisky, tequila, brandy, vodka o ron.
Los usuarios simplemente tienen que verter su bebida elegida en la botella y esperar uno o dos días, dependiendo de la intensidad del sabor a roble que desean.
La empresa de Paglione, con sede en Chicago, pasó tres años desarrollando este invento, que según él es la forma más pequeña y más rápida del mundo para replicar bebidas de larga crianza en barricas. Existen además otras ocho versiones de la botella con otros gustos como cereza, vainilla, arce y café disponibles a través del sitio oakbottle.com.
Paglione, de familia bodeguera expresó: "La botella está diseñada para un perfecto contacto de la madera en ausencia de aire en su interior".
"No decimos que esta botella transforme un vino mediocre en un gran vino, pero si mejorará la calidad y sabor de mucho vinos", añadió.
Paglione afirma que en dos días un Chardonnay joven "tendrá el sabor a un caro Chardonnay criado durante años en barricas".
Esta no es la primera botella de vino de madera de su tipo que se crea. En enero salió al mercado la llamada Pinoccio Barrique que se había lanzado en un sitio web de crowdfunding.
Sin embargo, la botella Pinocho Barrique tarda 10 días para replicar los efectos de seis meses en un roble, mientras que Oak Bottle tarda consigue el mismo efecto en dos días.
Fuente: Vinetur