Este nuevo método es el resultado de la progresión de tecnologías de detección en envases de papel y ofrece a los consumidores información clara.
Un grupo de investigadores de la Universidad de McMaster en Canadá, han desarrollado una serie de biosensores que pueden ser impresos dentro de los envases de papel, con lo que se podría verificar si los alimentos están contaminados por patógenos. La investigación ha sido publicada en la revista European Journal Chemistry.
Este nuevo método es el resultado de la progresión de tecnologías de detección en envases de papel y ofrece a los consumidores una respuesta clara, en forma de letras y símbolos, que aparecen en el envase para indicar la presencia o no de contaminación en el envase.
John Brennan, director del McMasters Biointerfaces Institute, asegura que se trata de un sistema fácil de utilizar y su implementación en las líneas de fabricación de alimentos es barata.
De acuerdo con Brennan, el sistema podría identificar la carne, verduras o frutas contaminadas. Para el personal sanitario, este método les permitiría diagnosticar de forma sencilla estas enfermedades, ahorrando tiempo y acelerando los distintos tratamientos a aplicar.
Fuente: Euro carne