Demandan productos congelados sostenibles

Señalan que en el mercado de la comida fuera de casa, en general, siguen triunfando los productos congelados cuyas ventas han crecido en más de un 4%.
El día 6 de marzo de 1935 está considerado como el del nacimiento de la comida refrigerada ya que ese día se expuso en un comercio detallista el primer armario para congelados en la ciudad de Springfield en el estado americano de Massachusetts. Con ello surgió una nueva forma - y la mayor innovación - en el campo de la conservación de productos alimenticios: el congelado de choque. Hasta hoy no existen otros sistemas de conservación sin alterar el producto, totalmente sin aditivos. Los primeros productos alimenticios que se podían obtener de los congeladores fueron hortalizas, frutas y pescados. El éxito obtenido con los productos congelados en el mundo entero fue con seguridad también el motivo por el que el presidente americano Ronald Reagan instauró en el año 1984 el "Frozen Food Day" que desde entonces se celebra todos los años el día 6 de marzo.

En el caso particular de Alemania, continúa el gran interés por los productos alimenticios congelados. Según una encuesta actual, un 90% de los alemanes opinan que los productos congelados han hecho posible la conservación de los alimentos para ser consumidos después, facilitando sumamente el trabajo de cocinar. En total, las ventas de productos congelados alcanzaron en 2014 unos 12.800 millones de euros, un 3% más que los 12.400 millones del año anterior. Hoy en día el comercio alemán ofrece a los consumidores en todo el país más de 17.000 artículos congelados. El consumo per cápita se sitúa en Alemania por encima de los 42 kilos.

En el mundo entero, los artículos congelados tienen un gran  potencial. En todo caso, no todas las regiones tienen las mismas posibilidades de crecimiento del consumo. Mientras que los americanos de Estados Unidos con un consumo anual per cápita de 52 kilos continúan siendo los imbatidos campeones mundiales en el consumo de productos congelados, aunque desde hace años se mantienen en estas cifras, las empresas del sector ven buenas posibilidades de crecimiento sobre todo en Europa Oriental y en Asia.

También los productos especiales para consumidores con determinadas intolerancias alimenticias o alergias ofrecen buenas posibilidades para el mercado. Según una encuesta realizada por la sociedad alemana de celíacos, DZG, en colaboración con la empresa sueca de productos de panadería congelados Almondy, quienes padecen esta dolencia desean  una mayor variedad de productos sin gluten, especialmente productos de panadería, aunque actualmente no tienen ninguna dificultad en obtener dulces sin gluten en el comercio.

Los productos de panadería son también los que más se venden dentro del sector de congelados y la tendencia es que las ventas sigan creciendo. Los productos de panadería congelados son los que tienen más éxito, sobre todo en el mercado de la comida fuera de casa. Los panecillos así como los pasteles y las tortas continúan gozando de una gran demanda. Este grupo de mercancías se beneficia de la demanda para desayunos y la comida entre horas (snacking). Uno de los grupos de productos congelados más apreciados por los consumidores continúan siendo el de las pizzas. También en el mercado de la comida fuera de casa las pizzas congeladas tuvieron el año pasado un gran crecimiento que, sin embargo, no se mantiene según muestran las reducidas ventas actuales.

En el mercado de la comida fuera de casa, en general, siguen triunfando los productos congelados y las ventas han crecido en más de un 4% para llegar aproximadamente a los 1,67 millones de toneladas. Los alimentos congelados constituyen una parte fija e imprescindible de las cocinas profesionales tanto en la gastronomía sistematizada como en la gastronomía clásica, en cantinas o en la atención a personas mayores y hospitales.

En el comercio detallista de la alimentación se observa un ligero crecimiento en las comidas preparadas, especialmente en las parciales. Las comidas completas y los potajes, por el contrario, mantienen su nivel de ventas con suaves pérdidas. Las tendencias se apartan de la costumbre de hacer la comida uno mismo y se acercan soluciones que hacen posible una alimentación rápida, sin complicaciones, flexible y sana. La oferta en el campo de los congelados es cada vez más variada. Se demandan también pequeños envases como resultado del cambio demográfico que se traduce en más hogares de una o dos personas.

También tiene importancia el tema de la sostenibilidad. Pensar ya en lo que va a ocurrir mañana es la preocupación. Los productos sostenibles proporcionan una imagen positiva y atraen a nuevos clientes. Styria-Beef de Alpen-Naturrindfleisch figura, por ejemplo, en relación con un proyecto para el mantenimiento de un singular paisaje cultural. En el marco de un extraordinario "programa para el mantenimiento de las zonas verdes", se ha llevado ganado a pastar en praderas que estaban en peligro de convertirse en maleza. De esta manera se hace posible conseguir unas condiciones ideales de vida para los animales y mantener el campo para las próximas generaciones.

Fuente: www.anuga.com