Se trata de tapones inteligentes, impresos en 3D con componentes electrónicos.
A partir de ahora, si la leche está mala ya no hará falta oler el líquido, sino que avisará el tapón del propio envase. Los tapones inteligentes, impresos en 3D con componente electrónicos, han sido creados por la Universidad de Berkley en California y por la Universidad nacional Chiao Tung en Taiwan y pueden detectar el deterioro del líquido de los contenedores de almacenamiento de alimentos donde se encuentran.
Estos nuevos tapones tienen un mecanismo basado en circuitos electrónico impresos en 3D. Dichos circuitos, junto con un sensor de conexión inalámbrica pasiva, son capaces de indicar si la leche o el zumo del contenedor están en mal estado solo con entrar en contacto con el líquido. Básicamente, los diferentes componentes te transmiten, en tiempo real, si tu bebida contiene la bacteria que hace que esté en mal estado.
Sus inventores hablan de que, potencialmente, se podrá usar una aplicación de móvil para que te informe del estado de la leche directamente al 'smartphone'. De momento, parece que la indicación de la calidad de la bebida está en el propio tapón.
Fuente: Europa Press.