El fruto disminuye los niveles de endotelina, indicó un estudio.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de California-Davis, en Estados Unidos, el consumo de nueces puede tener consecuencias positivas para pacientes con cáncer de próstata. Los investigadores comprobaron en un trabajo con animales que la ingesta de este fruto seco es capaz de reducir el tamaño y la tasa de crecimiento de estos tumores.
Esta nueva investigación surgió tras demostrarse que las nueces son beneficiosas para enfermedades del corazón, ya que reducen los niveles de endotelina, una sustancia que incrementa la inflamación de los vasos sanguíneos y que también se detecta en grandes dosis en pacientes de cáncer de próstata.
Para el desarrollo de este trabajo, se utilizaron ratones programados genéticamente para padecer cáncer de próstata que luego se dividieron en dos grupos. Uno de ellos se alimentó durante dos meses sólo con nueces, mientras que al resto se les administró aceite de soja. Los tumores de los ratones del primer grupo fueron 50% más pequeños y crecieron 30% más despacio.
La nutrición es uno de los factores que inciden en el desarrollo del cáncer de próstata, por lo que es importante tener en cuenta los alimentos que ayudan a su prevención, tales como el aceite de oliva, pescados azules o frutos secos, informó en un comunicado el Círculo de Braquiterapia Prostática. Son aconsejables alimentos que aporten grasas insaturadas y fibra, ya que esta última influye en los niveles circulantes de testosterona, hormona sexual masculina que se produce en los testículos y en las glándulas suprarrenales.
Además, la vitamina E, presente en frutas y verduras es un antioxidante que, combinado con el selenio, inhibe el desarrollo de tumores. El tomate, rico en esta vitamina, tiene también licopeno, que al consumirse de forma natural reduce las patologías cancerosas y cardiovasculares. Junto a estas premisas alimenticias, los miembros del citado foro consideran fundamental someterse a revisiones periódicas para detectar de manera precoz el cáncer de próstata, para lo que recomiendan a los varones de más de 50 años –45 años si hay antecedentes familiares– que acudan cada año al urólogo para hacerse revisiones.
Con información de Consumer Eroski