Además de involucrar a los consumidores, el diseño de empaque también debe informar. Debe explicar de una forma clara su propuesta única de venta y diferenciador de marca.
Algunos elementos clave para crear un diseño de empaquetado efectivo son:
Estética inteligente: cada decisión estética debe tener una lógica específica. En otras palabras, hacer algo bello sólo por el bien de la belleza no es una buena estrategia en lo que respecta al diseño de envases.
El diseño de su empaque debe ser una extensión perfecta de su trabajo inicial. La historia, el posicionamiento, la personalidad y los activos de marca existentes y futuros deben tenerse en cuenta al crear su diseño de embalaje.
Jerarquía de información: Establecer lo que los consumidores necesitan saber ante todo es un paso crucial en la creación de un diseño de empaquetado efectivo. Explicar claramente cuál es su producto, qué lo distingue y por qué un consumidor debe comprarlo lo más rápido posible será un elemento clave para su éxito.
Buen contenido: Muchos clientes, especialmente las nuevas marcas, dudan si van más allá, incluso un poco, cuando se trata de contenido; preferirían ir a lo seguro en lugar de arriesgarse a distanciarse de nadie. A veces, sin embargo, el mayor riesgo es no tomar uno en absoluto, por lo que, de una forma u otra, debe asegurarse de que su diseño de empaquetado ofrezca contenido atractivo, ya sea la historia de una marca o la personalidad de la marca.
Por último, el contenido debe ser consistente con los otros activos de la marca. Si se tiene éxito en dirigir a un consumidor al sitio web del producto, por ejemplo, ese comprador debe ser reforzado por la consistencia de la historia de la marca.
Gaste sabiamente: cuanto más se gaste en el diseño de un envase, mejor será. Sin embargo, un diseño de empaquetamiento innecesariamente costoso podría tener un impacto negativo. Esto a menudo se reduce a la selección de material y estructura.
Un diseño de empaque estructural personalizado es excelente, cuando puede pagarlo; sin embargo, es más que posible crear diseños de envases atractivos y galardonados con estructuras de stock. Lo mismo aplica para la selección de materiales. El recorte de gastos en cada esquina puede dar como resultado un diseño de empaque sin complicaciones, sin importar cuán extraordinarios sean los diseños.
Logístico y práctico: un diseño de empaque efectivo debe prestar atención a las preocupaciones logísticas y prácticas. El espacio libre es un buen ejemplo. Todos los minoristas tienen una cantidad limitada de espacio en los estantes para el que muchos productos compiten siempre. Por lo tanto, la capacidad de apilamiento es muy importante. Desea asegurarse de que el diseño de su embalaje no sólo permita la maximización del espacio de la estantería (con la mayor cantidad de productos posible), sino que no se caiga cada vez que una persona lo toque. Algo tan simple como eso podría frustrar al minorista y dar como resultado una orden única.
Evite la sobrecarga de información: el producto tiene mucho que ofrecer: una propuesta única de venta, características interesantes, una historia atractiva y más. Por lo tanto, es comprensible que las marcas quieran incluir tanta información como sea posible. Como regla general, sin embargo, cuanta más información se incluye en un diseño de envase dado, menos posibilidades hay de que el consumidor lo compre.
*Tate Sherman es estratega de packaging en Imagemme. Ha trabajado con una gama de nuevas empresas y compañías establecidas, Imagemme ofrece una amplia variedad de servicios de branding, desde el desarrollo de packaging y productos hasta el diseño web y la estrategia de marketing.