Existe una conciencia sobre la importancia de tener certificaciones, debido a que muchos de los demandantes son usuarios internacionales.
La industria del packaging ha crecido notablemente en los últimos años y ello llevo al incremento de un amplio número de exigencias en torno a la calidad de los envases. Cada vez es más frecuente ver en las plantas distintos entes que realizan auditorias y controlan los procesos llevados a cabo.
Hoy por hoy lo que se espera de una empresa proveedora de packaging es que posea normas de calidad no sólo en el producto sino también en la gestión de las empresas. En principio fundamental es contar con las líneas de las ISO 9000, sobre todo la ISO 9001 que indica los lineamientos principales para un sistema de gestión de calidad. Otras de las normas existentes son la ISO 14000, que se relaciona principalmente con el medio ambiente, la ISO 18000 que hace referencia al manejo del personal y por último la ISO 22000 que se expresa sobre la seguridad alimentaria y los riesgos de contaminación. La cuestión es introducir las normativas en un sistema integral de gestión de calidad.
En muchos casos las certificaciones son muy difíciles de conseguir. Por ejemplo, cuando son normas internacionales que no están presentes en los diferentes países. Es por eso muchas empresas siguen estos lineamientos y practican este tipo de gestión sin poseer una certificación formal.
En la industria del packaging hay una conciencia general sobre la importancia de poseer estas normas, lo que se debe a que en muchos casos los demandantes de sus productos son usuarios internacionales que tienen como política de la empresa contar con proveedores certificados y esto también lo piden sus empresas que están radicadas en los distintos países. Por eso todos los proveedores que pretenden contar con clientes importantes deben adaptarse a este tipo de situación.
CALIDAD
Para llevar a cabo un sistema de calidad se debe tomar antes que nada conciencia de la necesidad, los directivos de la empresa deben estar convencidos que es un proceso necesario e inevitable. Luego es necesario llevar a cabo toda la capacitación necesaria para realizar este proceso y posteriormente incorporar los conocimientos con los lineamientos de la norma. Es importante cumplir con cada punto de manera adecuada, como también es necesario otorgarle el tiempo indispensable para que decante el proceso de certificación en la organización, proceso que demanda alrededor de un año. Lo importante es realizar una mejora continua, ya que no alcanza simplemente con certificar, sino que es necesario continuar con el camino iniciado.
Otra de las normativas que deben tener en cuenta sobre todo los proveedores de packaging del sector alimenticio y farmacéutico son las Buenas Prácticas de Manufactura (GMP) que muestran los lineamientos necesarios para la obtención de productos seguros para el consumo humano. Las GMP delimitan un control exhaustivo sobre el proceso de producción, sobre los materiales primarios, el almacenamiento, los establecimientos, la higiene en la elaboración, el transporte de materias primas y del producto final y del personal.
Hay una batería muy amplia de normas, de las cuales algunas son certificables y otro grupo sirve como guía de prácticas. Un ejemplo es la línea de las ISO 18.601 hasta la 18.606, que están vinculadas al packaging y al medio ambiente. Estas normas no son certificables, sino que son guías de mejora en el reciclado, uso, etc.
Otros de los lineamientos que ayudan a las empresas a completar su sistema de calidad es el contar con políticas de Responsabilidad Social Empresarial (RSE), como el poseer la Certificación Forestal de la Madera que es entregada por el Consejo de Administración Forestal (FSC).
Para obtener esta normativa las empresas tienen que garantizar la trazabilidad de toda la cadena de custodia, asegurar que el uso de materias primas provenientes de bosques gestionados de modo responsable y de fuentes controladas, es decir, bosques que satisfacen las necesidades sociales, económicas y ecológicas de las generaciones presentes y futuras. Asegurar que los productos utilizados provienen de fuentes verificadas y cosechadas de manera responsable.
Si se pretende tener en la industria un sistema de calidad integral es necesario combinar las distintas resoluciones y certificaciones. La utilización de estas normas es complementaria, muchos requisitos pedidos por una se encuentran también en el resto, por lo que cuando una empresa inicia con una gestión de calidad le es más sencillo continuar y obtener una mayor cantidad de certificaciones sin tener que realizar cambios drásticos.
EMPAQUE PARA LA INDUSTRIA FARMACÉUTICA: CID PHARMA PACKAGING
La empresa se especializa en proveer empaque secundario para la industria farmacéutica, por eso fue necesario alinear a las Buenas Prácticas de Manufactura (GMP) tanto su sistema de gestión de calidad, como su planta productiva. Los mismos laboratorios fueron los que, a través de sus auditorías, fueron colaborando con sus observaciones, que hoy se ven reflejadas en acciones concretas.
Al estar alineada con las GMP, la empresa demuestra el firme objetivo de ser un socio en la cadena de valor de los laboratorios, trabajando muy fuerte en perfeccionar los procesos de producción, implementando y verificando arduos controles sobre las distintas etapas.
Contar con una planta productiva preparada para reducir al máximo el riesgo de mix up; tener un sistema de archivo controlado que evite que se produzcan versiones obsoletas; controlar y estandarizar el almacenaje o transporte para evitar daños del producto; realizar controles de proceso verificables para detectar los productos defectuosos (tanto en impresión, como en troquelado y pegado); trabajar con perfiles de color y colorímetro, con el fin de lograr los colores dentro de los estándar que pide el laboratorio; cumplir con procedimientos de limpieza y control de plagas, para asegurar que el producto se realiza en áreas acordes; gestionar los residuos de manera responsable y procedimentada, para colaborar activamente en la lucha contra la falsificación; son algunas de las acciones implementadas por la empresa que hacen al sistema de gestión de calidad.
En el fondo, el sustento de todo lo mencionado anteriormente, es tener una cultura de empresa tendiente a la mejora continua, y a estar alineados a los requerimientos de los laboratorios.
El concepto de fábrica externa es el foco principal: entender que al decidir ser proveedor de los laboratorios medicinales, se comienza a formar parte de la cadena de valor de una de las industrias más sensibles para la sociedad en su conjunto.
Con el firme objetivo de ser confiables para la industria farmacéutica, la empresa cuenta con un sistema que garantiza la trazabilidad de los productos fabricados, desde que ingresa la cartulina, hasta que se entrega el estuche terminado.
Referencias:
CID Pharma Packaging
Ingeniero Nestor Lisnik, Instituto Argentino del Envase
Gerardo Daskal, ISOPHAR empresa de servicios para la industria regulada.