El Consejo Oleícola Internacional introdujo cambios reglamentarios que ayudarán a la consolidación de los aceites de oliva en distintos mercados.El Consejo Oleícola Internacional (COI), el organismo intergubernamental que agrupa a los países productores y consumidores de aceite de oliva y aceitunas de mesa, aprobó un cambio en los parámetros de identificación de los aceites de oliva que favorece notablemente a Argentina. Gracias a esta modificación, muchos aceites de oliva vírgenes argentinos que hasta el momento eran excluidos a pesar de su altísima calidad, ahora podrán competir en los mercados más exigentes.
Se trata de una noticia histórica y muy positiva para nuestro país, porque nos pone en pie de igualdad para poder competir con los mejores aceites del mundo y nos abre oportunidades de negocios en nuevos mercados, afirmó Armando Manzur, Presidente de la Federación Olivícola Argentina (FOA). Además, Manzur destacó la importancia de la articulación público - privada que se logró para llevar adelante este proyecto, resaltando especialmente la labor del Ministerio de Agricultura y de la Cancillería en las negociaciones: fue un proceso de trabajo en equipo ejemplar en pos de un objetivo largamente buscado por la Argentina, aseguró el presidente de la FOA.
Los aceites de oliva argentinos se destacan actualmente por su calidad. Sin embargo, no todos ellos eran considerados por el COI en pie de igualdad con los aceites de oliva del Mediterráneo, en función de ciertas características que habían quedado obsoletas para su objetivo original que era combatir la adulteración de los aceites: Los rangos de composición para muchos parámetros son realmente muy acotados con la intención precisa de prevenir el fraude por agregado de otros aceites, pero esto generaba una barrera comercial seria cuando un aceite de altísima calidad se manifestaba naturalmente con composiciones químicas ligeramente diferentes. El desafío era adecuar las normativas y que sigan siendo eficaces para proteger la calidad y garantizar la no adulteración de los mismos, afirmó el Dr. Ariel Buedo, representante por Argentina ante el grupo de químicos del COI.
Según el Consejo, los aceites de oliva debían tener un contenido máximo de campesterol del 4%, entre otras variables, para ser considerados auténticos, explicó la química Martha Melgarejo, una de las técnicas representantes de la Argentina en el COI. En virtud de la geografía, los factores climáticos, la temperatura, etcétera, muchos de los aceites de origen local, a pesar de alcanzar estándares de excelencia iguales o superiores a los europeos, superan ese umbral y tienen características diferentes. Así, no obstante su excelente calidad, quedaban marginados de muchísimos mercados por un criterio que había quedado desfasado con el desarrollo de la producción olivícola en el mundo no europeo. Ahora, elevando el contenido de campesterol de 4% a 4,5% y endureciendo otros dos parámetros para continuar garantizando la no adulteración, nuestros aceites de oliva vírgenes cumplirán con la norma COI al igual que los griegos, por ejemplo, dijo Melgarejo.
Fuente: Federación Olivícola Argentina (FOA)