La destilación es un proceso de separación de mezclas líquidas en sus componentes constituyentes mediante la vaporización y condensación.
Además, este proceso se utiliza en una amplia gama de industrias, incluida la alimentaria, para la producción de una amplia gama de productos, desde bebidas alcohólicas y otros productos como:
- Bebidas alcohólicas: Whisky, vodka, ron, ginebra, tequila, etc.
- Aceites esenciales: Aceite de lavanda, aceite de limón, aceite de eucalipto, etc.
- Productos farmacéuticos: Alcohol etílico, acetona, éter, etc.
Destilación: un arte refinado por la tecnología
Las técnicas modernas de destilación están revolucionando la forma en que se producen los destilados, estas técnicas permiten a los fabricantes crear productos con sabores más complejos y sofisticados.
- La destilación en columna: Es un proceso continuo que utiliza una columna de fraccionamiento para separar los componentes de una mezcla líquida. Esta técnica permite a los fabricantes separar los componentes de una mezcla con mayor precisión que la destilación tradicional, lo que resulta en productos con sabores más complejos.
- La destilación al vacío: Se lleva a cabo a temperaturas más bajas que la destilación tradicional. Esto ayuda a preservar los sabores delicados de los productos, lo que resulta en destilados con sabores más suaves.
- Destilación Molecular: Opera bajo condiciones de vacío extremo, reduciendo la temperatura de ebullición de los compuestos. Esto previene la degradación térmica de componentes sensibles, resultando en un destilado más puro y con un perfil aromático mejor definido.
Además de estas técnicas, los ingenieros alimentarios están desarrollando nuevas tecnologías para optimizar la destilación de destilados, se están utilizando sensores de última generación para controlar los parámetros de destilación y garantizar la calidad del producto.
También se están utilizando modelos de aprendizaje automático para predecir el comportamiento de los destilados durante el proceso de destilación.