La Organización Mundial de la Salud (OMS) hace un llamado a los países para que adopten medidas regulatorias más estrictas sobre las fórmulas infantiles para combatir lo que describe como un panorama de marketing "profundamente preocupante". Una propuesta clave radica en tener un empaquetado sencillo para los productos de fórmula.
El empaquetado sencillo protegería a las madres y las familias de declaraciones y gráficos engañosos. La industria invierte en eslóganes de marketing, afirmaciones y estos detalles de marca a menudo a un gran costo porque saben que es influyente. El empaquetado simple se trata de proporcionar a las madres y las familias información precisa, no información y gráficos para aumentar las ventas.
Te puede interesar: La NOM-131-SSA1-2012 y las fórmulas para lactantes con necesidades especiales
Detalle del packaging propuesto
El llamado de la OMS para un empaquetado neutro plantea la pregunta de qué significa esto realmente. Si bien los especialistas reconocen que no existe una definición acordada de empaquetado genérico para los productos lácteos de fórmula, si se introdujera el empaquetado simple, podría simplemente incluir:
- Lista de ingredientes
- Detallar la cantidad de azúcar que contiene el producto
- Las declaraciones de propiedades saludables o nutricionales junto con imágenes o adornos como cintas doradas para inferir algún tipo de calidad 'premium' no estarían permitidas
Se sugiere que la edad para la que están destinados productos específicos podría indicarse mediante un rango de edad en lugar de un número en una serie. Como se ve en la terminología actual como "etapa 1, etapa 2, etapa 3. Pues el marketing utiliza esta técnica de promoción cruzada para generar lealtad a la marca cuando, de hecho, hay poca diferencia entre los productos.
Te puede interesar: Patentan fórmulas lácteas con componentes MFGM
Declaraciones poco claras
El Código también establece que las declaraciones de propiedades nutricionales y saludables no deben permitirse para los sucedáneos de la leche materna. Excepto cuando se disponga específicamente en la legislación nacional.
Esta es una de las áreas más problemáticas debido a la falta de evidencia sólida para fundamentar o respaldar el uso de declaraciones de propiedades nutricionales y saludables. Un ejemplo de esto es enriquecer la leche de fórmula con nutrientes, que normalmente están presentes en la leche materna. Como los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga como el ácido docosahexaenoico (DHA). Esas leches se etiquetan como 'pro' o 'avanzada'”.
Estas connotaciones implican un producto superior que podría confundir a los padres sobre la calidad de la leche materna. Sin embargo, el cuerpo de evidencia científica existente no confirma un beneficio sobre el rendimiento cognitivo en las fórmulas enriquecidas con DHA alimentadas por niños.
Las características de diseño adicionales, como bandas o cintas doradas, se utilizan en el empaque para sugerir algún tipo de producto de mayor calidad cuando hay poca diferencia en el contenido real. Además, estos enfoques se utilizan para justificar costos más altos y aumentarlos, lo que explota a las familias que usan leche de fórmula para los niños.
Te puede interesar: Fórmulas para bebés orgánicas y su gran potencial dentro de la industria