La deficiencia de micronutrientes sigue siendo una preocupación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que se abordó en la 76.ª Asamblea Mundial de la Salud, instando a las empresas de la industria alimentaria a enriquecer alimentos para hacer frente a la crisis mundial del hambre.
Las organizaciones de salud detallan que la crisis de hambre afecta principalmente a niños en edad preescolar y a 67% de las mujeres en edad reproductiva, ocasionando daños irreversibles en los neonatos.
Deficiencia de micronutrientes
En el foro se detalló que los micronutrientes que más hacen falta en alimentos son folato, hierro, vitamina A y zinc además de vitaminas B12, B6, D, C cobre, hierro y selenio, los cuales juegan un papel importante en la salud inmunitaria.
Se detalla que tres mil millones de personas en todo el mundo no tienen los recursos económicos para permitirse una dieta variada, saludable y nutritiva, que contenga todos los minerales y vitaminas necesarias para una buena salud.
Con las pruebas tangentes de los micronutrientes que se necesitan en alimentos, es más fácil que las empresas trabajen en ingredientes para enriquecer los productos y brindar vitaminas y minerales.
Añadir micronutrientes
La OMS recomienda a las empresas agregar harinas hechas de trigo y maíz, arroz, también aceites naturales como de coco o aguacate y otros alimentos que pueden ayudar a cada país a prevenir que las personas sufran deficiencias de micronutrientes.
La fortificación es una intervención basada en evidencia que contribuye a prevenir, reducir y controlar las deficiencias de micronutrientes, puede utilizarse para corregir una deficiencia demostrada de micronutrientes en la población general o en grupos de población específicos.”
Anke Sentko, vicepresidenta de asuntos regulatorios y comunicación nutricional de Beneo.
Fortificación a gran escala
La fortificación de alimentos a gran escala se recomienda como intervención poderosa basada en evidencia y rentable para combatir las consecuencias de las deficiencias de vitaminas y mineras.
Entre las enfermedades o deficiencias que se piensa atacar con la fortificación está la de yodo, anemia, de hierro y defectos del tubo neural, así como fortalecer el sistema inmunitario, para lo que se necesita la colaboración a nivel comunitario, regional y nacional.
Países que trabajan en nutrientes
27 estados de la Unión Europea, además de Australia, Brasil, Canadá, Colombia, Cuba, Ecuador, Israel, Malasia y Paraguay, junto con el apoyo de 50 organizaciones, ya firmaron para trabajar en conjunto que acelere los esfuerzos de fortificación de alimentos con micronutrientes.
Aunque los países más afectados son los que tienen menos ingresos económicos, en la carta que detalla los problemas mencionan que ya es una crisis global a la que se le debe de hacer frente.
Una política exitosa
Con esta carta firmada por los países interesados se verá una política exitosa para fortalecer la inmunidad a las enfermedades y aumentar significativamente la energía y productividad de las personas.
Con un promedio de 27 dólares por persona se puede mejorar la salud y productividad para prevenir enfermedades, discapacidades intelectuales, abortos espontáneos, interrupción de embarazos no deseados, muerte prematura y otras afecciones de embarazadas y niños.