El 29 de julio es la celebración de un de los platillos italianos más reconocidos a nivel mundial: la lasaña.
Es considerado por los historiadores culinarios como la pasta más antigua. Su nombre proviene del griego “lasanon” a través del latín “lasanum”. Que hace alusión al envase o cazo en el que se acostumbraba cocinarla.
Consistía en tiras largas de pasta y los italianos fueron los que desarrollaron máquinas que actualmente se utilizan para la elaboración de la pasta de lasaña.
Pues en tiempos medievales la pasta se dejaba secar al sol en la zona del Mediterráneo y se cortaba con un utensilio especial. Esto para cocinarla en platos cremosos, dulces, consumidos durante la cuaresma cristiana.
Te puede interesar: Día del queso americano, un orgullo para la producción de lácteos en el mundo
Lasaña, un platillo de gran tradición
John Mariani especifica en su Dictionary of Italian Food and Drink que el nombre de lo que actualmente consiste en porciones generosas de carne y queso.
Con el tiempo la lasagna sería heredada por los romanos. Quienes a su vez utilizaron el mismo elemento para presentar la comida y servirla en la mesa.
Éstos modificaron la receta y la realizaron con una especie de pasta que se apilaba en capas con distintos rellenos. Con la expansión del imperio romano este plato se divulgó por toda Europa.
Pero siempre se creyó que la receta tal cual la conocemos hoy en día fue originaria de Italia.
La lasaña tradicional italiana lleva salsa boloñesa, esta sufrió muchos cambios, sobre todo desde el siglo XVI, cuando el tomate fue introducido en la cocina europea desde las Américas.
Te puede interesar: Guisantes amarillos, el ingrediente de los nuevos espaguetis