Estudio muestra la percepción del consumidor de 2024

La empresa Trendhunter de métricas de rendimiento, presentó la percepción del consumidor para 2024, en varios sectores, incluyendo la industria alimentaria, con las tendencias y perspectivas que más interesan.

Alimentación vegana, consumo de microalgas, marcas sostenibles, metaverso, ingesta de alcohol, en diferentes generaciones, son algunas de las tendencias que el reporte desglosó para entender el futuro del sector.

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Alimentación vegana sigue creciendo

A medida que más consumidores adoptan dietas flexitarianas, también transmiten esas dietas a sus hijos, esto puede observarse hasta en las opciones de entre comidas con alimentos y bebidas veganas.

Una de las razones es que el consumo ético es cada vez más popular a medida que factores como las prácticas agrícolas inhumanas y el cambio climático influyen en las decisiones de compra de los consumidores.

Pero que sea vegano no es suficiente, ya que también debe ser asequible para que este al alcance de todos los consumidores, con esto se están intentando cambiar la percepción de que comer vegano es caro.

Alimentos sostenibles

Las alternativas veganas a la carne o el marisco como las microalgas seguirán en tendencias por los múltiples usos que se han extendido ahora a la imitación de la carne, ya que desde el pescado hasta la creación de helado vegano tiene beneficios.

Una de las razones por las que los alimentos alternativos se han hecho populares incluso entre los consumidores que no son veganos o vegetarianos es que promueven la producción sostenible, además que la tecnología ha hecho que los sabores sean idénticos.

Otro ejemplo sostenible son los edulcorantes ecológicos, que equilibran la función y el sabor, que se eleboran con ingredientes reciclados o procesos de producción verdes con la ventaja de parecer más nutritivos para los consumidores.

Establecimientos sostenibles

Los consumidores no sólo buscan que los alimentos sean sostenibles, también los establecimientos y las entregas, por lo que los bares ecológicos apuntan al futuro del comercio minorista de alimentos y bebidas.

Estos bares dan prioridad a la reducción de residuos, el reciclaje y la conservación del agua., para hacer frente al cambio climático que tanto daño se han generado, por lo que marcas con valores crecen en popularidad.

Bajar la huella de carbono

Siguiendo por el mismo camino, la huella de carbono es un factor del consumo de productos de origen animal que también busca ser menor, es por eso y a raíz de la pasada pandemia, los consumidores han optado por cocinar en casa.

El consumo de alternativas vegetales, también sigue al alza, como leches vegetales, o hasta aceites de oliva, cada vez recurren más a marcas que dan prioridad a la salud del medio ambiente y reducen o neutralizan su impacto en la medida de lo posible.

Por otra parte, las empresas de cárnicos trabajan para reducir el impacto del desperdicio de alimentos, ya que es bien conocido que la producción de productos de origen animal genera un impacto ambiental fuerte.

Envases sostenibles

Los envases sostenibles también se unen a la tendencia, para crear toda una economía circular con el mismo enfoque, por lo que todo el sector sostenibles cada vez es más popular y las tiendas ofrecer productos sin envases o con opciones reciclables.

Las opciones de entrega son otra opción que aprovecha los beneficios de la tecnología, con diseños ecológicos que reducen el uso de transporte que contamina e incluye vehículos eléctricos o estrategias de marketing como el metaverso.

Nuevas generaciones quieren consumo indulgente

La industria del alcohol se inspira en prácticas populares de bienestar, por la tendencia de autocuidado y productos indulgentes, con eso cada vez más marcas crean bebidas sin alcohol o con sabores atractivos para llamar la atención.

El reporte de Trendhunter muestra que el consumo del futuro es sostenible, saludable y amigable con el medio ambiente, siempre buscando satisfacer a las nuevas generaciones que son consientes y exigentes de lo que quieren.

Consumidores muestran interés en alimentos sostenibles, pero no se ve reflejado