El mundo que nos rodea, sobre todo en la industria de alimentos y bebidas, requiere de compromisos cada vez mayores por parte de las compañías productoras de alimentos. En el caso de la sustentabilidad en el vino, Viña Concha y Toro lleva un largo camino recorrido y aún así, siempre aspiran a más.
En entrevista exclusiva para The Food Tech®, Valentina Lira, Gerente de Sustentabilidad en Viña Concha y Toro nos compartió cuál ha sido el trayecto que la compañía ha seguido hasta haber reducido el 35% de su huella de carbono en tan solo cinco años.
La sustentabilidad: un camino que se construye
Desde antes de que el concepto de sustentabilidad fuera considerado como el “deber ser” en distintas industrias, la vinícola chilena comenzó a dar sus primeros pasos en esa dirección desde la década de los 90. No se trató de un cambio repentino en sus operaciones o decisiones, sino que más bien, implicó ajustes graduales que se han ido dando con el tiempo.
La primera medida en la que pusieron especial atención fue en el cuidado del agua. Mediante sistemas de riego por goteo, fueron cubriendo sus 10 mil hectáreas de viñedos.
Sin embargo, sus estrategias puntuales en torno a la sostenibilidad comenzaron a plantearse a nivel corporativo en el año 2011, con una mirada a largo plazo. Es por eso, que este tema es abordado de manera sistémica, para que puedan notar avances y reafirmar sus prácticas, tanto a nivel ambiental como social y económico.
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Innovación ¿obstáculo o herramienta?
Cuando se trata de innovar en pro de la sustentabilidad, no siempre se cuenta con las soluciones aptas a las necesidades del momento. Un ejemplo con el que se encontraron en Viña Concha y Toro fue con los paneles de celdas solares.
Los avances tecnológicos que se dieron en materia energética a lo largo de los años permitieron que poco a poco, los costos de estos insumos se fueran reduciendo. Así, fue posible implementarlos sin afectar el presupuesto de la empresa.
También han emprendido iniciativas respecto al tratamiento de residuos líquidos. Aunque aun no hay alternativas del todo costeables, se trata de un aspecto relevante en el que han puesto empeño:
“Hoy en día es caro, pero son cosas en las que tienes que invertir y esperar que a futuro vaya retribuyendo”, comparte Valentina
Asimismo, a pesar de la tendencia en sustitución de combustibles fósiles, sigue sin haber la tecnología apropiada para garantizar movilidad de unidades a distancias largas. Por lo tanto, está abierta la búsqueda de mecanismos de transporte alternativos; o bien, continúa la espera de que la tecnología logre avances más viables para generar reemplazos masivos.
De hecho, la compañía se ha tomado tan en serio la solución de problemáticas del día a día, que incluso abrieron el Centro de Investigación e Innovación Viña Concha y Toro, desde el que realizan investigaciones abiertas que se publican en papers y se comparten con las autoridades.
Desde este organismo, han hecho notables avances respecto a investigación e innovación. “Algunas son efectivamente materias relacionadas con la sustentabilidad que apoyan la estrategia que se tiene en el mediano y largo plazo. Esa, por ejemplo, fue una una inversión propia, no menor”, añade Patricio Poblete, Gerente de Comunicaciones Corporativas en Viña Concha y Toro.
Uso y obtención de recursos en favor de la sostenibilidad
Para tener acceso a las tecnologías que permiten la transformación de materia prima en productos terminados mediante la sustentabilidad, se requiere inversión… no sólo de recursos humanos dedicados a tareas específicas, sino a nivel financiero.
En este sentido, la unión con distintos grupos y sectores suelen ser fructíferos para los participantes. Si bien, no existen fórmulas únicas, la realidad es que hay muchas opciones a considerar para obtener el cumplimiento de metas sostenibles específicas, como:
- Alianzas dentro de sectores
- Asociaciones con otras compañías
- Búsqueda de socios externos
- Modelos de leasing
“Cuando empezamos a transitar hacia energías limpias y renovables en el año 2020 los paneles solares eran demasiado caros. Buscamos alternativas y encontramos un generador de energía en Chile, y ya que hoy en día existe una ley para comprar energía renovable, no necesitamos auto generarla, pero sí podemos construir una alianza con un proveedor así para focalizarnos en nuestro negocio, que realmente es hacer vino. Trabajar con socios especialistas también es económicamente más rentable para nosotros”.
“Con los residuos tenemos un desafío en nuestras instalaciones. Hoy en día gestionamos el 98% de ellos, lo que quiere decir que prácticamente todos se van o a reciclaje o a reutilización, ya sea en campo, como materia a través del solidarizado, o también a través de reciclaje hacia el hacia nuevos materiales o hacia los mismos materiales”
“Lo que tenemos como como desafío puntual es la parte de los residuos orgánicos, que son los desechos de los comedores. Esto es más difícil tratar y para ello estamos trabajando en la implementación de composteras y en upcycling, que es cuando tomo algo y lo transformo en algo de mayor valor”
“Ahí tenemos una alianza con una empresa que en Chile que se lleva nuestros residuos plásticos de etiquetas y con eso hacen envases para productos del hogar. Entonces tenemos la trazabilidad completa del residuo y se va generando este círculo virtuoso en términos de upcycling de materiales, ya no es sólo mediante el reciclaje”, profundiza Lira.
Sustentabilidad en el vino, ¿cuáles han sido sus beneficios?
Para Viña Concha y Toro la apuesta está muy clara: desde que migraron hacia un esquema energético apoyado en paneles solares, el costo de su consumo de energía se redujo de un 10 a un 15%
Las medidas que han trazado están tan claras, que incluso tienen todo un estudio sobre Estrategia de Sustentabilidad Corporativa con miras al cumplimiento de objetivos puntuales en 2025.
Para llegar a aquel momento, han construido un enfoque de futuro regenerativo dividido en etapas desde las que pretenden impactar:
- A sus clientes
- Colaboradores
- A la comunidad
- Consumidores
- Al planeta
- A proveedores
“Hemos medido nuestra huella de carbono anualmente desde el año 2007, las mediciones que hemos obtenido nos demuestran que nuestra huella se ha reducido un 35% desde 2017 y esa es una reducción tremenda, prácticamente un tercio de las emisiones de la compañía. Estamos hablando de reducciones absolutas; o sea, en la medida en que nosotros hemos ido creciendo en tamaño, hemos ido reduciendo nuestras emisiones”.
“Como compañía sabemos que tenemos múltiples desafíos, pero también sabemos que no nos podemos hacer cargo de todos porque sería algo interminable. Por eso nos focalizamos en los puntos donde pensamos que podemos generar mayor impacto y de acuerdo con eso se construyen programas”, comparte la experta.
De este modo, tienen un plan de seguimiento con el que contribuyen con 10 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible marcados por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
El papel del packaging en favor de la sustentabilidad en el vino
La industria del vino tiene una relación obligada con el vidrio. El material y la forma con la que resguarda al líquido obtenido a partir de la Vitis vinifera lo han hecho la mejor opción que ha existido por siglos.
Sin embargo, el que haya sido la opción más fiable hasta ahora no quiere decir que no pueda tener mejoras. Viña Concha y Toro asumió el desafío de rediseñar sus botellas para que fueran más livianas, lo que implica menos emisiones de CO2, tanto en su elaboración como en su transporte.
Este ajuste no surgió simplemente del deseo de innovar, sino que se desprende de una serie de pasos para llegar al desarrollo de un producto probado y aprobado:
- Se presenta la necesidad de reducir costos en materiales de insumos
- Áreas como desarrollo, marketing y proveedores colaboran en opciones viables
- Se prueba el uso de las botellas para que la reducción del peso sea significativa
- A su vez, se testea que la botella soporte el paso por las líneas de producción sin efectos adversos como rompimientos
- Se pone a prueba que las botellas sean capaces de aguantar envíos de exportaciones a 130 países distintos
“Hay que ser súper cuidadoso con los insumos de packaging. Si lo miras en el contexto de la economía circular y como acción-reacción, todo lo que utilicemos de origen se transforma en un residuo en el punto de destino”.
Elección de materiales y balance financiero
“Por lo tanto, tenemos que pensar en que los materiales sean reciclables, que los envases sean lo más livianos posible, pero asegurar que eso no vaya en desmedro de la calidad o seguridad del producto, porque entraríamos en un desbalance y el eje central de todo lo que hacemos bajo la sustentabilidad es para potenciar nuestro negocio, es para que lo hagamos de manera responsable con nuestro consumidor, con nuestros clientes y con todos los distintos espejos con quienes nosotros nos relacionamos”, afirma Valentina.
Asimismo, han implementado estrategias en favor de su compromiso con la naturaleza, que, bajo prácticas de agricultura regenerativa de manera conjunta con el área agrícola, e inventarios de biodiversidad los mantienen al tanto de la vida que los acompaña en bosques y viñedos.
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Agua, el recurso hídrico de valor infinito
Siendo una empresa agrícola, en la compañía son conscientes de la importancia que tiene el agua. Es por eso, que todos sus viñedos se riegan por goteo; aunado a esto, ya están trabajando desde su Centro de Investigación en una alternativa que les permita emplear agricultura de precisión.
“Hay un piloto cuyos primeros resultados están en torno al 20% de reducción en el consumo de agua en viñedos”, comparte Valentina.
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¿Existe un solo camino para la sustentabilidad en el vino?
Tal y como Valentina apunta, “en sustentabilidad, no existe una receta única, porque lo que vas trabajando en el tiempo tiene mucho que ver con un análisis respecto a los impactos que se quieren disminuir, pero también con los que se desean destacar o construir”.
“Lo más importante es tener claridad de dónde puedes generar un cambio con tu gestión, para que efectivamente puedas ver cómo se va transformando bajo una mirada a largo plazo. De ahí en adelante se te aclara el camino, porque quizá te enamoras del fin, pero no del cómo y cuando vas encontrando desafíos, debes tener claro cuál es ese horizonte”, expone la directora.
A su vez, Patricio Poblete complementa: “Se requiere un compromiso permanente para hacer las cosas bien. A veces hay un buen día y hay veces que uno puede retroceder. Cuando se adquiere ese compromiso desde el Consejo Directivo de la Compañía, va permeando hacia abajo”.
La complejidad de certificarse como Empresa B
“En la empresa quedó expresamente escrito en los estatutos en el año 2021, cuando nos certificamos como una Empresa B. Por ese compromiso escrito, los estatutos de la compañía se modificaron por primera vez en 120 años”.
Ya que para certificarse como Empresa B es necesario aprobar una serie de evaluaciones que miden el desempeño de distintas áreas, se hace obligatorio que el compromiso que la compañía adquiere quede plasmado en sus estatutos.
“A lo mejor para una empresa que tiene pocos dueños o que tiene un dueño es fácil, pero nosotros somos una empresa abierta en bolsa. Eso significó que tuviéramos que presentar esta moción en la junta de accionistas de la compañía y la unanimidad señaló que estaba de acuerdo con que los estatutos se modificaran para incorporar el compromiso ambiental y social de Viña Concha y Toro por la mejora continua, por seguir avanzando, por generar impactos positivos a nuestros stakeholders”, agrega Lira.
“Lo que más orgullo da es que uno ve las diferencias. Ves cosas de antes y notas cómo han cambiado. Los distintos equipos te cuentan las mejoras que han ido haciendo para reducir emisiones, ahorrar agua, o cómo se están organizando internamente para generar equipos de trabajo que busquen soluciones para la eficiencia energética, por ejemplo”.
“Eso genera orgullo de que esta mentalidad va permeando y redituando no solo en el tema del bienestar y engagement interno, sino que también económicamente para la comunidad. Esperamos también, que sea apreciado por nuestros consumidores, que reconozcan en nosotros una marca de vinos sustentable”, finaliza la experta.