El Parlamento Europeo y negociadores del Consejo de la Unión Europea (UE), reforzarán la transparencia en el sector de la miel con el fin de mitigar la adulteración que por años ha existido en el mercado.
Lo anterior se dio a conocer en un acuerdo con los actores del sector que mostraron las nuevas normas para destacar que todas las mieles del mercado deben contar con:
- Nombre del producto
- Etiquetado preciso con ingredientes
- País de procedencia
Nuevas normas impactan en el etiquetado de la miel
Respecto al etiquetado de la miel, las normas acordaron que serán obligatorias las indicaciones claras en un campo visible respecto al nombre del producto. Asimismo, se deberá informar el lugar donde la miel se fabricó y si tiene algún ingrediente añadido.
En el caso de mieles exportadas fuera de la UE la investigación será precisa, ya que se sospecha que han entrado mieles adulteradas que incorporaron azúcar al momento de su producción.
Otro dato importante que impactará a los envases pide que se indique el porcentaje de miel procedente al menos de cuatro países de origen. Si este porcentaje no representa más de la mitad del total del producto, se deberá indicar con exactitud.
Lo anterior se da a conocer después de que la Comisión Europea (CU) propuso una revisión de las normas de comercialización sobre "desayunos" que no han tenido una actualización desde hace 20 años.
La UE en contra de las mieles adulteradas
- De acuerdo a investigaciones de la Comisión Europea, se sospecha que el 46% de las muestras recolectadas de miel importadas estaban adulteradas con jarabes.
Pruebas científicas realizadas a productos en Estados Unidos y el Reino Unido demostraron que todas las mieles que salieron adulteradas provenían de Nueva Zelanda.
Innovaciones para combatir la adulteración de la miel
China es uno de los países que ha hecho más innovaciones para detectar adulteración de la miel, a través de un sensor compacto que tiene una herramienta con resonador plano que indica cuando el producto tiene otros ingredientes.
Para rastrear la procedencia del producto, la CE propuso un código de identificación de apicultores que se propone establecer en una plataforma de expertos para recopilar los datos de control y detectar la adulteración inmediata y de donde proviene.
La CE combate la adulteración de la miel
Para informar al respecto de los productos con miel, la CE preparó un informe para evaluar la obligatoriedad del etiquetado del país de origen de la fruta en zumos, confituras y mermeladas que se espera cumplir en un plazo de 36 meses.
Esta regla establecerá que al menos 450 gramos de fruta se deben producir en un kilo de confituras y mermeladas; es decir, que al menos la mitad del producto contenga fruta o miel natural para ofrecer productos de alta calidad.
Priorizando la calidad del producto
En cuanto al etiquetado del azúcar, se acordó que la etiqueta que tenga la leyenda “contiene sólo azúcares naturales” será sólo para los jugos de frutas, y cuando diga con menos azúcares añadidos sólo será válido si tienen un 30% menos.
Un dato importante es que las mieles de alta calidad no pueden utilizar edulcorantes para compensar el efecto de la reducción del azúcar en el sabor, textura y la calidad del producto final.
Alexander Bernhuber experto en miel de Austria afirmó que estas nuevas normativas permiten un etiquetado transparente que lucha contra el fraude de la miel, que es una constante en la industria.
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