El aluminio es uno de los materiales que se siguen manteniendo en la industria porque ha demostrado ser reciclable, apartir de ciertos procesos y adaptarse a las tendencias del mercado, sin embargo, existen varios tipos de aluminio y la industria ha mostrado que no es tan conveniente como se espera.
Sobre todo, la industria lo aprovecha para elaborar tapas de aluminio que cierran envases de vidrio, promoviendo de esta manera la economía circular.
Sin embargo, ambientalistas no creen que este material sea la mejor solución para envases de vidrio, porque arroja millones de toneladas de Gases de Efecto invernadero (GEI) al año, como dióxido de carbono, óxido de azufre y de nitrógeno.
Elaboración de aluminio para embalaje
La principal labor del aluminio es para crear latas con una extrusión y reducción delgada que funciona perfecto para bebidas por su formación de embutición profunda.
Mientras que otro uso lo hace el papel de aluminio, que aunque también se usa para la industria de alimentos, su función es más sencilla al proteger de la humedad o materiales compuestos y empaques blandos.
Como tercer uso están las tapas de aluminio, que se realizan de igual manera que las latas, pero con mayor grosor para tener mejor resistencia y conservación de los alimentos.
Pero para entender como funciona la elaboración de envases de aluminio, es importante considerar que este material se transforma a bauxita para generar nuevos envases o tapas, sin embargo, requiere grandes cantidades de energía y agua, que se contradice con la idea de una economía circular.
Reciclaje de envases de aluminio
Los envases de aluminio son muy fáciles de reciclar, el metal no pierde calidad y además se puede hacer ilimitadas veces, de acuerdo a la Asociación para el Reciclado de Productos de Aluminio (ARPAL).
Con el reciclaje de aluminio la industria se ahorra alrededor del 95% de energía que es necesario para producir aluminio puro a partir de la bauxita, aunque de nuevo los ambientalistas piensen que no es tan favorable, sobre todo para las tapas de aluminio que son de un material más grueso.
Contaminación en las tapas de aluminio
El aluminio es uno de los peores materiales para conservar alimentos, sobre todo porque cuando se expone al calor, como los rayos del sol arroja sustancias que contaminan los alimentos con óxidos, que en grandes cantidades es perjudicial para la salud.
Países como Francia, Bélgica, Alemania y Reino Unido ya han prohibido el aluminio en cualquiera de sus presentaciones para los envases de alimentos.
Este escenario se espera ver pronto en toda la Unión Europea (UE) y posteriormente en otras regiones. Pero, antes de que esto suceda la industria en América Latina y otras regiones sigue aprovechando el uso de aluminio advirtiendo de algunos de sus contraindicaciones:
- Envases de aluminio, incluidas tapas, no deben ser expuestas a calor.
- En envases de vidrio con tapas de aluminio se recomienda en productos a granel, polvo o que se refrigeren.
- La trazabilidad de estos envases debe ser cuidada para evitar abolladuras o golpes.