La legislación alimentaria en Argentina desempeña un papel fundamental en la protección de la salud pública, y en garantizar la calidad y seguridad de los alimentos.
El Código Alimentario Argentino (CAA), Ley N° 18.284 establece los requisitos y estándares que deben cumplir los alimentos en términos de:
- Comercialización
- Envasado
- Etiquetado
- Procesamiento
- Producción
Además, se regulan aspectos específicos para diferentes categorías de alimentos, como productos infantiles, vegetales, cárnicos y lácteos.
Legislación alimentaria en favor de los consumidores
En el acercamiento hacia los consumidores, el etiquetado es primordial, pues además conlleva el respeto a sus derechos para recibir información completa, objetiva y veraz sobre los productos que adquieren.
Con esto se pretende evitar elecciones erróneas por parte de los usuarios e impedir el consumo excesivo de determinados alimentos que podrían resultar peligrosos e inseguros para la salud.
Declaración de nutrientes y publicidad
La normativa vigente también cubre lo relacionado al rotulado nutricional y la publicidad en alimentos, así como la información adicional (declaraciones de propiedades nutricionales o comparativas, Información Nutricional Complementaria o INC, por sus siglas en inglés).
En línea con esta orientación, Argentina ha dado un paso audaz hacia la promoción de la alimentación saludable con la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable (Ley N° 27.642.) que, a partir de 2021, introdujo el rotulado frontal.
Esta medida afectó al patrocinio relacionado con la medicina, nutrición y/o deporte, restringiendo el uso de elementos interactivos. Las marcas alcanzadas por esta normativa se vieron obligadas a incorporar sellos de advertencia basados en la evaluación del perfil de nutrientes críticos como sodio, azúcares añadidos, grasas totales, edulcorantes, cafeína y calorías, en diferentes etapas.
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Consecuencias de la legislación alimentaria en Argentina
Esta medida ha generado oportunidades para desarrollar alternativas más saludables y atractivas para el público, y desafiar los límites de la industria, permitiendo a las empresas destacarse y comunicar de manera efectiva los atributos únicos de sus productos.
Por lo tanto, contribuye a mejorar la calidad y el estilo de vida de los argentinos, puesto que según los resultados del estudio Latinoamericano de Nutrición y Salud (ELANS), Argentina:
- Lidera el consumo de bebidas azucaradas
- Tiene escasa diversidad en la dieta de su población
- Presenta los índices más bajos de ingesta de fibra en Latinoamérica
- Se encuentra entre los dos primeros lugares en consumo de grasas saturadas y carnes rojas
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La normativa y su mantenimiento
En cuanto al segundo pilar de la legislación alimentaria argentina, las autoridades competentes han establecido normas y controles periódicos para garantizar la higiene y la manipulación segura de los alimentos en todas las etapas de la cadena alimentaria.
Esto incluye la regulación de aditivos alimentarios, los límites máximos permitidos para contaminantes, micotoxinas, residuos de pesticidas y metales pesados, así como el Manejo Integrado de Plagas (MIP) y las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) en la cosecha y tratamiento de materias primas.
Todo esto se realiza para asegurarse de que cada bocado sea una experiencia segura y deliciosa.
La ley promueve la implementación de sistemas de gestión de calidad en los establecimientos alimentarios, como las Buenas Prácticas de Manufactura (BPM) y el Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP), fundamentales para prevenir la aparición de enfermedades transmitidas por alimentos, garantizar su calidad y aptitud para el consumo humano, y fomentar la mejora continua y la excelencia en la producción.
Legislación alimentaria en camino a la sostenibilidad
Argentina es un referente en la promoción de prácticas saludables y sostenibles. Desde la ley de enfermedad celíaca, que obliga a las empresas a ofrecer menús libres de gluten e identificar medicamentos en función de su contenido, hasta la fortificación de nutrientes esenciales en alimentos para lactantes, el país está a la vanguardia de la innovación alimentaria.
Lo más asombroso de todo, es la adaptabilidad de esta normativa a las exigencias cambiantes de los clientes. Se ha incorporado:
- La sanción y certificación de alimentos orgánicos
- La autorización, coexistencia y aislamiento de productos transgénicos
- La inclusión de los términos “veganos” y “vegetarianos” en las etiquetas de los alimentos a base de plantas
Esto permite a las empresas destacarse y comunicar de manera efectiva los atributos únicos de sus productos.
¡Es una invitación a la innovación en el diseño y la presentación de etiquetas, y a una revolución en la industria alimentaria, donde la creatividad y la originalidad se mezclan con los sabores más exquisitos de la gastronomía argentina!