El avance tecnológico en la industria alimentaria ha llevado al desarrollo del rotulado frontal en Argentina como una herramienta valiosa para informar de manera rápida y clara a los consumidores sobre el contenido nutricional de los productos.
La promulgación de la Ley de Promoción de la Alimentación Saludable (No. 27.642) ha sentado las bases para un cambio significativo en la industria alimentaria y la percepción del consumidor.
El sistema se basa en el análisis de nutrientes críticos, que incluyen azúcares añadidos, grasas totales y saturadas, cafeína, sodio, edulcorantes y calorías. Para ello, se establecen puntos de corte específicos para cada uno de estos nutrientes, y los productos que superan estos límites deben llevar sellos de advertencia en sus etiquetas, entre los que se encuentran:
- Azúcares Añadidos: Productos que contienen un 10% o más de calorías provenientes de azúcares añadidos.
- Grasas Totales: Alimentos con un 30% o más de calorías provenientes de grasas totales.
- Grasas Saturadas: En una etapa inicial, se consideran aquellos con un 10% o más de calorías provenientes de grasas saturadas.
- Sodio en Exceso: Alimentos que contienen 1 mg o más de sodio por cada kcal del producto, o 300 mg o más cada 100 g o ml del producto, o bebidas analcohólicas sin aporte energético cuyo contenido de sodio sea de 40 mg o más cada 100 ml.
- Exceso de Calorías: Productos que cumplen con alguno de los sellos anteriores y aportan 275 kcal o más cada 100 g de producto, o bebidas analcohólicas con algún sello y que aportan 25 kcal o más cada 100 ml de producto.
- Edulcorantes: Deberá declararse independientemente de si se han añadido o no, incluyendo polialcoholes y aditivos edulcorantes que puedan cumplir otra función en el producto final.
- Cafeína: Debe declararse independientemente de la cantidad adicionada al alimento.
Seguro te interesa: La importancia del rotulado y etiquetado de alimentos
El rotulado frontal y sus limitantes
En la búsqueda de una mayor transparencia, la ley prohíbe la incorporación de Información Nutricional Complementaria en alimentos y bebidas que cuenten con al menos un sello de advertencia.
Esto incluye marcas y nombres de fantasía que sugieran propiedades nutricionales particulares, así como el uso de imágenes, elementos interactivos, obsequios, dibujos animados y celebridades, así como la participación en concursos o juegos.
Además, se limita el patrocinio o aval de sociedades científicas o asociaciones civiles relacionadas con la medicina, nutrición y deporte.
Retos de las marcas ante la ley de sellos frontales en Argentina
La implementación del rotulado frontal ha presentado desafíos significativos para la industria alimentaria. La reformulación de productos, el mantenimiento de la identidad de marca y la respuesta a las reacciones de los consumidores son algunos de los retos a los que se enfrentan las empresas para cumplir con la normativa vigente:
- Según una encuesta realizada por Kantar a nivel nacional y publicada por Clarín en abril del año en curso, con la aparición de los sellos en las góndolas, el 40% de los consumidores cambiaron alguna marca o producto.
- Además, el 80% de los encuestados considera reducir la frecuencia de compra o el volumen de consumo.
Este impacto representa una oportunidad para las marcas de buscar nuevas estrategias creativas en sus comunicaciones. La ley de rotulado frontal abre la posibilidad de entender qué mensajes resuenan mejor con el público y cómo adaptar las estrategias de marketing para conectarse con un nuevo segmento de mercado más consciente y preocupado por la salud.
No dejes de ver: Rotulado de alimentos y la percepción del consumidor
Más allá de las regulaciones: educación y conciencia en el consumidor
Además de la implementación del rotulado frontal, el éxito de esta iniciativa depende en gran medida de la educación y concienciación del consumidor.
El Ministerio de Salud de la Nación ha llevado a cabo campañas de información para explicar el significado de los sellos de advertencia y fomentar la toma de decisiones más saludables en el momento de la compra.
Las escuelas y las instituciones educativas también juegan un papel vital en esta tarea:
- La inclusión de la educación nutricional en el currículo escolar es esencial para inculcar hábitos alimenticios saludables desde una edad temprana.
- Los docentes y padres deben trabajar en conjunto para enseñar a los niños a interpretar el rotulado frontal y comprender la importancia de una dieta equilibrada.
La experiencia en Argentina también puede servir de ejemplo para otros países de la región y del mundo. Observando los logros y desafíos que enfrenta el país sudamericano, otras naciones podrían considerar implementar medidas similares para abordar las problemáticas relacionadas con la salud pública y la obesidad.
En un mundo donde la información está al alcance de nuestras manos, ¿realmente conocemos lo que estamos consumiendo? El rotulado frontal en Argentina nos muestra una ventana hacia una alimentación más consciente y saludable, pero ¿estamos prestando atención a lo que dice?
La próxima vez que visites el supermercado, detente un momento frente a los productos y pregúntate: ¿sé lo que estoy eligiendo para mi salud y bienestar? La respuesta podría sorprenderte.
Te invitamos a leer: Rotulado nutricional para estar bien informado