De acuerdo con Kantar Worldpanel México se pudo detectar que el 60% de los hogares mexicanos tienen niños de hasta 12 años y que esto representa grandes gastos en el consumo infantil de productos básicos como alimentos y bebidas.
Entre más pequeños, más alto es el gasto en los hogares con niños menores de 5 años, un 6% por arriba que el resto de las familias que tienen tickets mayores de compra.
"Cuando los niños están en edad preescolar se compran más productos de marcas Premium, sobre todo en alimentación, pero conforme crecen incrementan las cantidades de lo que consumen, por lo que en ocasiones, para ajustarse a las necesidades de los niños más grandes tienen que cambiar las marcas Premium que son un poco más caras, por marcas promedio o económicas", explica Fabián Ghirardelly, directivo de Kantar Worldpanel México.
¿Cómo se distribuye el consumo infantil?
Respecto de la edad, los hogares con niños entre 6 y 12 años son quienes más gastan en cereales, un 20% por arriba del promedio y en galletas gastan un 7%. Mientras que los hogares con menores de 5 años gastan un 8% más en yogurt y un 10% más en jugo. Aunque estos hogares con pequeñines son quienes consumen más jugo (51 litros al año) y consumen 7 veces más refresco.
También a partir de los 6 años empiezan a destacar categorías como jamón, salchicha, mayonesa y pan, pero no sólo consumen sándwiches salados, el 20% de lo que se compra de mermeladas es para niños menores de 12 años. En los hogares con niños menores de 5 años son los que más gastan en pasta para sopas, y un 22% de lo que se compra es en especial para los niños.
Lo que más se compra
Leche saborizada ocupa el primer lugar, $4 de cada $10 que se gastan en la categoría son para un niño en específico. Los postres refrigerados ocupan el segundo lugar seguido de botanas con un 30%. También un 30% de lo que se compra de botanas es para niños menores de 13 años, a esa edad es cuando un mayor número de hogares compran salsas botaneras y salsa cátsup (cerca de 4 litros) aunque consumen más la salsa de tomate.
"Desde pequeños empiezan a elegir lo que les gusta, aunque la decisión final recae en los padres. Los niños son los compradores del mañana, hay que empezar a crear fidelidad en ellos que tienen un fuerte poder en la compra", agrega el directivo.
Los hogares donde sólo cuentan con uno de los papás tienen hábitos distintos. Acuden seis veces más de compras que las parejas con niños, esto va de la mano con el hecho que van a canales más informales como la tiendita de la esquina. Destacan en niveles socioeconómicos bajos, por lo que su desembolso es bajo.
Fuente: Kantar Worldpanel México