Pensar en nutrición no sólo es considerar el proceso biológico que sufren los alimentos para obtener nutrimentos, en la actualidad la palabra nutrición nos lleva a pensar en marcas, empresas, empaques, distribución, preferencias, costos, ofertas, entre otras cosas. Por lo que es imprescindible no hablar de la industria alimentaria cuando nos referimos al ser humano.
La importancia que tienen las empresas en las elecciones de los consumidores llega a ser aún más importante que la del médico o nutriólogo, lo anterior por la capacidad de publicidad y mercadotecnia presentes en los medios de comunicación, en los empaques y ahora en las redes sociales.
Es ya sabido que todos tenemos al menos 10 marcas de productos en la mente y que éstas son elegidas por diferentes razones: por preferencia, por practicidad, por beneficio, por antojo o simplemente por recordación. Si aun con esto nos preguntamos ¿qué rol tiene la industria en el ámbito de la nutrición?, estamos un poco perdidos; sin embargo podemos preguntar ¿cómo debería ser el rol?
Bajo este tenor dirigiré mis comentarios, considerando el trabajo, y la importancia que le ha dado la industria alimentaria a temas como alimentación, orientación alimentaria y nutrición por supuesto. Durante décadas la industria de alimentos ha mostrado un crecimiento acelerado en materia de tecnología alimentaria y mejora nutricional.
Esta evolución, no sólo en la producción misma de alimentos, sino también en los estándares de calidad y en la legislación alimentaria, han permitido una mayor disponibilidad de productos frescos y empacados de calidades nutricionales muy diversas, cuya información y uso por parte del consumidor requiere de herramientas educativas más amplias y precisas, he aquí un área de oportunidad para la industria alimentaria.
Es así como se han identificado que en los últimos 35 años aproximadamente y por cuestiones de tendencias en el consumo de alimentos y productos, la industria ha mostrado un desarrollo impresionante en las tecnologías de producción de los alimentos regulares y con características benéficas para la salud humana, que cumplan con las exigencias sensoriales y nutritivas de cada consumidor.
Evolución de producción de alimentos
La historia nos demuestra que la rápida evolución de la industria alimentaria fue una inteligente respuesta al mayor reconocimiento social del papel que juega la dieta en la prevención y cura de enfermedades; al mayor acceso a la información por parte del consumidor; a la necesidad de disponer de alimentos procesados que aligeren el trabajo ante los cambios y la vida acelerada; a la posibilidad de “sustituir” alimentos por “suplementos” como una medida fácil para lograr satisfacer las necesidades nutricionales diarias y la necesidad de “pertenencia” e identificación con “modas” fugaces que llevan a los grupos a comportarse de determinada forma.
Como parte de esos cambios trascendentales en la producción y mercadeo de alimentos, surgió la necesidad de capacitar aún más al personal y de integrar equipos multidisciplinarios que trabajaran de forma conjunta para cumplir con ese compromiso de ofertar en el mercado productos alimenticios que cumplieran con las exigencias de las poblaciones y que no sólo el ingeniero o químico en alimentos, opinaran sobre la fórmula y empaque. Nuevamente la industria responde a estas necesidades e inicia por reconocer la importancia de la nutrición como especialidad o plaza dentro de su empresa.
Hablando de publicidad y mercadotecnia la industria tiene, hasta hace unos años el poder de decir lo que a su empresa favorezca, en empaques, etiquetas, comerciales, folleto, etc., sin embargo en México se empezó a regular esta información dirigida al consumidor, ya que en muchas ocasiones el primer contacto es el niño, por ello la importancia de incluir códigos de regulación o autorregulación.
Información de las empresas al consumidor
Cuando la empresa se da cuenta del liderazgo que puede tener si enfoca su información y publicidad de una manera clara y saludable el circulo de comunicación asertiva en orientación alimentaria se empieza a cerrar y a su vez crece, pues los encargados de brindar orientación pueden influir en las decisiones correctas de los consumidores.
Ahora bien, debe existir una base sólida de información tanto en las empresas, como en los comunicadores para que puedan trasmitir el mensaje de manera correcta a los consumidores. Por ello el rol, nuevamente de la industria es fundamental, ya que los involucrados se encargan de analizar y estudiar las actitudes de los consumidores por medio de encuestas, cuestionarios, estudios, entre otros.
Sin una comprensión básica de las actitudes del consumidor, las comunicaciones relacionadas con temas importantes tales como la nutrición, la salud y seguridad alimenticia, tienen pocas probabilidades de identificar con precisión y de satisfacer de manera efectiva las necesidades verdaderas de información de los consumidores.
Para saber más del comportamiento y de qué manera influirán en el consumidor, además de averiguar el conocimiento de los consumidores acerca temas tan importantes, es esencial investigar sus preconcepciones, actitudes subyacentes, creencias básicas, y expectativas futuras sobre estos tópicos.
Comportamiento del consumidor
Las actitudes de los consumidores son complejas. El conocimiento y las opiniones objetivas no constituyen el cuadro completo. Las actitudes de los consumidores se determinan por una lógica de emociones que involucra sus conceptos sobre valores, su respeto al orden natural, su percepción acerca la evolución progresiva a través del tiempo, sus conceptos sobre el compromiso y la participación responsable, y su necesidad y apreciación de los beneficios realistas y equitativos.
La encuesta más reciente de Wirthlin WorldWide Quórum, IFIC revela que los consumidores de los Estados Unidos generalmente tienen una actitud positiva hacia la biotecnología alimenticia y la comunicación de la industria.
Con el ejemplo anterior nos damos cuenta de cuán importante es el acercamiento de la industria hacia el consumidor y que de manera indirecta están impactando e introduciéndose en “su nutrición”.
Es así como el consumidor va estableciendo contacto y haciendo parte de la vida cotidiana el rol de la empresa en la nutrición individual, porque de manera general como en un principio lo mencione no se pueden separar.
Autor: Mónica I. Hurtado González