En México, las alitas de pollo han trascendido como una de las opciones de comida rápida más populares y versátiles.
Inicialmente introducidas en menús de restaurantes estadounidenses y barras deportivas, estas piezas de pollo han encontrado un lugar permanente en el mercado mexicano, adaptándose a los gustos locales y diversificándose con nuevas tendencias.
Actualmente, el consumo de alitas en México no solo es impulsado por su sabor, sino también por la gran variedad de opciones en salsas, acompañamientos y conceptos de preparación.
Desde los ingredientes hasta la innovación en sabores, esta es una categoría que evoluciona rápidamente y que se integra en los hábitos de consumo de la población mexicana.
“Las alitas son un producto que ya ha adoptado prácticamente el 100% del mercado mexicano. Lo cual representa un importante cambio porque 15 años atrás, eran un producto que se utilizaba para otros fines y no tanto para el consumo como actualmente se da”, declara en entrevista para THE FOOD TECH®, Hugo Magaña, Presidente del Consejo de Administración de Santas Alitas.
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Ingredientes: clave para una experiencia de sabor
La preparación de alitas de pollo en México sigue los estándares internacionales en cuanto a calidad y manejo de insumos, pero también ha incorporado ingredientes propios para adaptarse a los sabores locales.
Las alitas tradicionales se preparan con piezas de pollo marinadas y fritas o asadas, con una cobertura de salsa que puede variar desde el clásico búfalo hasta opciones que van desde lo dulce hasta lo extremadamente picante.
Las salsas, sin duda, juegan un papel crucial. En el mercado mexicano, donde el picante es fundamental, se ha innovado con ingredientes que dan a las alitas un perfil de sabor único y adaptado al paladar nacional, como:
- chile habanero
- chile de árbol
- chipotle
“Los sabores más populares de alitas son, en primer lugar, buffalo que es la picosita, luego la barbecue y después pimienta limón. Y de ahí ya todas las demás llámese teriyaki, miel mostaza, mango habanero o cualquier sabor que las diferentes cadenas manejan”, señala Magaña.
Agrega que el paladar mexicano está muy acostumbrado al picante, por lo que se pueden combinar sabores frutales con algún picante como chipotle, jalapeño o habanero, con ello podemos innovar nuevas opciones para sus consumidores.
“Estamos buscando alianzas con ciertas marcas o licencias para poder crear estos productos. Ahorita la tendencia está mucho la parte "instagrameable", a lo que se le pueda tomar fotografías, la parte de las mezclas de sabores, cosas que sean muy llamativas. Entonces estamos procurando estar todo el tiempo estar en esta tendencia”, explica.
Tendencias en el consumo de alitas
La popularidad de las alitas en México se ha convertido en una tendencia que trasciende edades y momentos de consumo. Las alitas eran un platillo que se consumía en reuniones y eventos deportivos; sin embargo, han ganado terreno en distintos momentos del día y en una variedad de contextos.
De acuerdo con el líder de Santas Alitas, una de las tendencias más importantes en este mercado son las colaboraciones de marca. “Por ejemplo, alguna salsa de sabor Doritos o sabor takis, creo que las mezclas de los productos con alguna marca ya conocida por el paladar están muy presentes en el mercado”, expone.
Respecto a las tendencias alimentarias como plant-based, el ejecutivo considera que “el mercado todavía está muy inmaduro para algún desarrollo vegano y más que hemos democratizado las alitas llevándolas a un mercado un poco más hacia la base de la pirámide.”
Por otro lado, el crecimiento de la venta en línea en las cadenas de alitas en México presenta un importante crecimiento, ya que han desarrollado aplicaciones móviles o se han asociado con plataformas de entrega para facilitar el pedido y la entrega a domicilio.
Finalmente, este mercado ha entendido que el consumidor mexicano es exigente y está en constante búsqueda de nuevas experiencias, por lo que cada vez se invierte más en la personalización y en la creación de opciones que respondan a sus gustos y necesidades.
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