Los expertos en alimentos y bebidas están convencidos de que el sector empieza a tomar conciencia de todo lo relacionado con la textura, pues esta tiene una significativa influencia en la percepción del sabor y el aroma.
Más importante aún, las texturas inusuales convierten la experiencia de comer y beber en algo excitante. Y un producto que los consumidores perciben como algo especial tiene grandes posibilidades de terminar de nuevo en la cesta de la compra.
Julia Trebels, Product Manager de SIG Combibloc, comenta a este respecto: “La textura queda determinada por una serie de aspectos, que incluyen todo lo que podamos detectar a través de nuestros sentidos: con la lengua y el paladar, pero también con los ojos, manos y oídos".
"La combinación de diferentes texturas en un producto mejora su complejidad estructural; y esto despierta el interés del consumidor que considera que beber y comer no solo debería cumplir con el objetivo principal de satisfacer la sed y el hambre, sino que además debería ser divertido. Cada vez son más las personas que se aventuran en lo que respecta a los alimentos. Además de las cosas con las que ya están familiarizadas, les gusta probar nuevos alimentos con el fin de descubrir exactamente lo que mejor satisface sus propios gustos y necesidades en cada momento”, añade.
La textura proporciona información
¿Un alimento es fresco o ha sido procesado de forma elaborada, es blando o crujiente, o aterciopelado? Toda esta información proviene de la textura. Por esa razón, la textura de un alimento debería jugar un papel fundamental en el diseño y desarrollo de producto, con el objeto de garantizar que el producto sea adecuado para el mercado objetivo deseado, y el grupo objetivo deseado en cada caso.
El tipo de textura que se percibe como algo disfrutable depende en parte del trasfondo cultural, pero también del momento en que se vaya a consumir una bebida.
En palabras de Julia Trebels: “Por ejemplo, la gente prefiere en general que los refrescos para saciar la sed sean esbeltos, ligeros y ácidos. Por otra parte, si la prioridad es el puro disfrute, una bebida puede ser mucho más cremosa y rica".
"Extras añadidos como trocitos de nueces o frutas, trocitos de chocolate, cereales o semillas pueden acrecentar el factor de disfrute de una bebida, y su complejidad. Con trocitos como estos es posible intensificar y prolongar la experiencia placentera de comer y beber, en el sentido de que no todos los sabores le llegan simultáneamente al consumidor, sino que en cierta medida ese efecto se retrasa debido a las diferentes texturas”, abunda.
Valor añadido
Las modernas tecnologías de procesamiento, llenado y envasado permiten a los fabricantes de alimentación ofrecer una amplia variedad de productos con texturas particulares que son, por ejemplo, ‘extra crujientes’, ‘extra cremosas’, ‘super jugosas’, ‘que se derriten en la boca’ o ‘más afrutadas aún’, o el contenido particular del producto puede proporcionar una textura singular.
“La tecnología drinksplus* ofrece a los fabricantes de bebidas la opción de añadir a su cartera productos con texturas poco comunes, y envasarlos asépticamente en envases de cartón utilizando máquinas llenadoras estándar para productos lácteos líquidos y bebidas no carbonatadas", señala Julia Trebels.
"La tecnología permite añadir pequeños trocitos de frutas o verduras a una bebida, de la misma forma que semillas, cereales, coco rallado o nueces. La proporción de partículas, que brinda a la bebida un valor añadido perceptible en el sentido más literal del término, puede ser de hasta el diez por ciento. Los trocitos individuales pueden medir hasta seis milímetros de largo y ancho”, aclara.
Ya se ha implementado una amplia gama de conceptos de producto con la tecnología drinksplus, y se han posicionado con éxito en varias regiones del mundo. Como uno de los ejemplos más recientes, el principal grupo lácteo de China, Mengniu Dairy, ha lanzado una leche premium que contiene granos de trigo y avena, introduciendo con ello a China en la categoría de producto de comida láctea que se puede beber.
En palabras de Julia Trebels: “En esta categoría de producto, la textura juega un papel especial, porque es un portador de información que le dice al consumidor que lo que está bebiendo es de alta calidad, nutritivo, y deja satisfecho”.
La tecnología drinksplus también es adecuada para bebidas no carbonatadas, que adquieren un carácter especial con el añadido de trocitos extra.
La compañía coreana Haitai Beverages, por ejemplo, ha lanzado recientemente dos smoothies de marca premium ‘Sunkist’, a los que se proporciona una textura y autenticidad especial gracias a trocitos de auténtica fruta, lo que resulta en una experiencia excepcional.
Los productos se encuentran disponibles en Manzana/Mango con trocitos de manzana, y Fresa con trocitos de melocotón.
Una solución más esbelta
En el área de productos de alimentación, la textura juega un papel importante. “Pero los fabricantes de alimentos no siempre necesitan una solución de alta gama para llenar alimentos cuando toman la decisión de ampliar su cartera añadiendo productos con una textura diferente. Por ejemplo, puede llenarse una gran cantidad de alimentos utilizando las máquinas llenadoras más esbeltas Food Option*, que se basan en la tecnología de llenado aséptico estándar para bebidas; pero además pueden llenar toda una gama de productos más viscosos así como productos con partículas”, comenta Julia Trebels de SIG Combibloc.
Con una máquina llenadora Food Option, pueden llenarse asépticamente productos con hasta un diez por ciento de ingredientes gruesos. Cada una de las partículas puede ser de hasta 6 mm de tamaño; las fibras pueden medir 1 x 15 mm, con una viscosidad potencial de hasta 3.500 mPas. Con las máquinas llenadoras Food Option, el know-how del campo de la tecnología de llenado de alimentos aséptico se ha transferido a las máquinas llenadoras estándar para bebidas, sin que ello añada mayor complejidad al sistema en su conjunto, ni grandes costes de inversión.
La compañía láctea alemana frischli, uno de los principales proveedores de productos lácteos para el consumo a granel, tiene, entre otras, una máquina llenadora Food Option, lo que proporciona a la compañía una sólida base sobre la cual llenar asépticamente toda una diversidad de productos y responder de forma eficaz a las necesidades de mercado con un alto grado de flexibilidad.
Con la máquina llenadora Food Option, frischli puede llenar no solo leche, nata y bebidas lácteas, sino también salsas para postre, pudin y natillas, todos productos más viscosos. Un total de unos 100 productos frischli diferentes se encontrarán disponibles en envases de cartón*.
Timo Winkelmann, Gerente General de frischli, comenta: “Particularmente para los postres, la textura de los productos juega un papel fundamental. Si un pudin no es lo suficientemente cremoso, no sobrevivirá en el mercado. El sabor de un producto se ve muy influido por la sensación en la boca que experimenta el consumidor al probarlo. Encontrar la receta adecuada significa también decidir una textura que sea adecuada para el producto, el grupo objetivo y el uso previsto”.
Julia Trebels de SIG Combibloc añade: “Los fabricantes de alimentos están bien asesorados para prestar también una cuidadosa atención a la textura al momento de diseñar el envase para este tipo de producto. El uso de imágenes, ilustraciones o anuncios de textura es adecuado para dar a los consumidores información sobre la textura del producto justo en el lineal de ventas, lo que puede ayudarles a tomar su decisión de compra. Y esta información también es necesaria para que el consumidor entienda el concepto de producto y sepa qué esperar. Las características de textura ayudan a que el consumidor meta en su carrito de compras precisamente esos productos que mejor se adaptan a sus preferencias de sabor”.
(*) Hace referencia a la tecnología, maquinaria y envases de SIG Combibloc.
Fuente: SIG Combibloc, uno de los proveedores mundiales de envases de cartón y máquinas llenadoras para bebidas y alimentos.