La industria de alimentos y bebidas identifica las grandes tendencias de consumo de para 2023.
Estas son:
- Consumo de alternativas a las proteínas de origen animal
- Consumo sostenible (Desperdicio Alimentario Cero)
- Consumo de productos de proximidad
Esta año que recién inicia trae una serie de complejidades como la pandemia por Covid-19, el conflicto Rusia-Ucrania que ha impactado de forma importante el suministro en la industria de alimentos y bebidas, y cada vez menos empresas que no reaccionan y se adaptan rápido al cambio.
En ese sentido, la inflación está impulsando el cambio de hábitos del consumidor y la limitación en el gasto repercutirá en los resultados del sector de gran consumo, pues gastarán más, pero comprarán menos productos.
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Tendencias de consumo de alimentos en 2023
De acuerdo con AINIA, las tendencias de consumo más importantes para este año son las siguientes:
1. Consumo de alternativas a las proteínas de origen animal
El consumidor cada vez está más interesado en consumir alimentos plant based por diversas razones. Su enfoque hacia hábitos más saludables depende de su interés en una alimentación más saludable, el bienestar animal y el impacto ambiental que tienen sus hábitos de consumo.
El “Percepción del consumidor sobre proteínas alternativas”, estudio realizado por AINIA indica que 1 de cada 3 consumidores comen semanalmente alimentos que sustituyen el consumo de proteínas de origen animal.
El estudio también señala que, en los últimos dos años, el 72 % de los consumidores aumentaron el consumo de alimentos que sustituyen a las proteínas de origen animal.
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2. Consumo sostenible
De acuerdo con el ODS 12 Producción y Consumo Responsable, cada vez hay mayor concienciación por parte de las empresas y de los consumidores en priorizar un consumo sostenible.
Hay compañías que desarrollan nuevas líneas de productos basadas en subproductos alimenticios que los transforman en nuevos ingredientes y/o productos otorgándoles una nueva vida. Así como la obtención de bioplásticos a partir de residuos orgánicos.
Por ello, hay una buena predisposición del consumidor en comprar productos elaborados a partir de alimentos que normalmente se desperdiciarían. Para consolidar esto resulta necesaria una mayor educación en hábitos alimenticios, consciencia en la compra y consumo por parte de los consumidores.
También los envases juegan un papel importante frente al desperdicio alimentario, pues favorecen que los alimentos se mantengan en buenas condiciones. Por ejemplo, con recubrimientos con propiedades avanzadas.
3. Consumo de productos de proximidad
Al consumidor le resulta muy importante conocer el origen e incluso la historia que hay detrás de los productos que consume.
Las herramientas tecnológicas como el etiquetado digital de los productos les permiten a los consumidores conocer, entre otras variables:
- Declaraciones éticas
- Huella de carbono
- Trazabilidad de su origen
El control del gasto debido a la inflación favorece la compra y consumo de productos de proximidad, además se simplifica la actividad logística y, en consecuencia, se reducen los efectos contaminantes.
Alimentación enfocada en hábitos más saludables y sostenibles
Los hábitos de los consumidores han cambiado hacia alimentación más saludable. Ahora cocinan sin grasas, sin calorías vacías, además y consumen productos frescos. También están comprando freidoras de aire que les permite tener alimentos fritos de forma más saludable.
Aunque el consumo de productos frescos es básico para el consumidor, el elevado precio de estos a causa de la inflación está favoreciendo que su compra se incline a más productos envasados.
Una oportunidad para las empresas es ofrecer un surtido que cubra las nuevas necesidades de los consumidores, para ello se debe analizar bien su comportamiento.
Ya que no se trata de ofrecer un surtido más amplio para vender más producto, sino el surtido de productos adecuado. Por ello, resulta fundamental conocer al consumidor.
De esta manera, se concluye que para conectar con el consumidor es necesario ofrecer claridad y simplicidad en los mensajes enviados en la publicidad y el packaging. Se debe transmitir confianza al consumidor, lo cual se puede lograr proveyendo información precisa y clara.
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