La energía es una fuente esencial para el desarrollo social de un país, pues de ella depende en gran medida la calidad de vida de sus habitantes.
Para concienciar sobre su importancia, el 14 de febrero se conmemora el Día Mundial de la Energía, para impulsar la búsqueda de alternativas para un futuro más sostenible.
- Según la comunidad científica, resulta necesario reducir las emisiones a casi la mitad en 2030 y alcanzar las cero emisiones netas en 2050 para evitar los impactos más negativos del cambio climático.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas (ONU), los combustibles fósiles (como el carbón, el petróleo y el gas), son los principales causantes del cambio climático. Ya que son responsables de más del 75 % del total de emisiones de gases globales de efecto invernadero y cerca del 90 % de todas las emisiones en dióxido de carbono.
No dejes de ver: Una planta de carbonización convertirá basura orgánica en energía en Ciudad de México
El consumo de energía en la industria de alimentos
La industria de alimentos y bebidas es un importante consumidor de energía, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), esta industria representa alrededor del 30% del consumo total de energía en el mundo. Y además, genera 20% del total de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Por ello, el sector representa una ventana de oportunidad para aumentar su eficiencia energética, maximizar los beneficios que se obtienen de las cadenas productivas y ser proporcional con la situación ecológica actual y los ciclos económicos cambiantes.
El consumo energético total de una planta de alimentos se distribuye entre:
- la fuerza motriz (máquinas y equipos del proceso)
- la conservación en frío
- los servicios auxiliares como el aire comprimido y la iluminación
En consecuencia, el camino hacia la transición y uso de energías sostenibles, aunado a las nuevas tecnologías y procesos en la industria, se consideran esenciales para reducir el impacto ambiental de las actividades asociadas a la industria y lo que ello implica.
La transición energética en la industria alimentaria
La transición energética hace referencia al cambio de un sistema energético que utiliza principalmente combustibles fósiles a uno con bajas emisiones o, idealmente, sin emisiones de carbono. Y utiliza como herramienta principal la producción de energía con fuentes renovables.
La industria alimentaria consume grandes cantidades de energía debido a los procesos que ejecuta diariamente, como la climatización y la refrigeración que son fundamentales en este sector.
Pues ayudan a preservar la producción por más tiempo. Se estima que alrededor del 30% del costo de producción total está relacionado con consumo energético.
Es por esta razón que uno de los principales retos de la industria de alimentos es lograr un ahorro eficiente de energía. Mientras se suma a la búsqueda mundial por hacer la transición a energías más limpias.
Por último, la industria debe considerar su dependencia energética y establecer planes de acción para mitigar riesgos. A largo plazo, se debe trabajar hacia la autosuficiencia energética.