La irradiación de alimentos es un tratamiento físico con alta energía, mediante el uso de radiaciones ionizantes, es decir, que ocasiona pérdida de los electrones más externos de los átomos y moléculas convirtiendo a los mismos en iones.
Se considera un método alternativo para la conservación de alimentos. Durante la irradiación, los alimentos se exponen brevemente a una fuente de energía radiante (rayos gamma, rayos X o electrones acelerados) dentro de una instalación protectora.
La irradiación de alimentos se caracteriza por ser un proceso en frío y que se puede realizar en envases cerrados. Los materiales de los envases deberán asegurar una buena preservación e inviolabilidad de los alimentos, y ser compatibles con el proceso de irradiación.
Se han realizado innumerables estudios y organismos internacionales como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el Codex Alimentarius y la Organización Mundial de la Salud (OMS), quienes coinciden que con los métodos actuales, los alimentos irradiados no se vuelven radioactivos y no cambian sus propiedades nutricionales ni características organolépticas.
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Objetivos de la irradiación de alimentos
De acuerdo con la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), la irradiación puede servir para varios propósitos:
- Prevención de enfermedades transmitidas por los alimentos. Se usa para eliminar los organismos que producen enfermedades transmitidas por los alimentos como Salmonella y Escherichia coli (E. coli).
- Conservación. Utilizado para destruir o inactivar los organismos que producen la descomposición y para extender la vida de los alimentos en el anaquel.
- Control de insectos. Es para destruir insectos en el interior o sobre frutas tropicales importadas a los Estados Unidos. Además, la irradiación disminuye la necesidad de usar otras prácticas para el control de plagas que pueden dañar la fruta.
- Retraso de la germinación y la maduración. Se utiliza para inhibir la germinación (por ejemplo, de los porotos) y para retrasar la maduración de la fruta y aumentar su duración.
- Esterilización. Los alimentos esterilizados por medio de la irradiación están expuestos a niveles de tratamiento sustancialmente mayores que aquellos que se aprobaron para uso normal.
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Fuentes de irradiación aprobadas para su uso en alimentos
Hay tres fuentes de irradiación aprobadas para su uso en alimentos.
1. Los rayos gamma
Se emiten desde formas radioactivas del elemento cobalto (cobalto 60) o del elemento cesio (cesio 137).
2. Los rayos X
Se producen por la reflexión de un flujo de electrones hiperenergéticos de una sustancia objetivo (por lo general un metal pesado) hacia el alimento.
3. El haz de electrones (o e-beam)
Es similar a los rayos X y es un flujo de electrones impulsados por un acelerador de electrones hacia el alimento.
Esto dice el Codex Alimentarius para este tipo de alimentos
La norma general del Codex para los alimentos irradiados aplica a los alimentos tratados con radiaciones ionizantes que se utilizan conforme a los códigos de higiene, las normas alimentarias y los códigos de transporte aplicables. No se aplica a los alimentos expuestos a dosis emitidas por instrumentos de medición utilizados a efectos de inspección.
Esta normativa señala que para la irradiación de cualquier alimento, la dosis mínima absorbida deberá ser la suficiente para lograr la finalidad tecnológica.
Y la dosis máxima absorbida deberá ser inferior a la dosis que comprometería la seguridad del consumidor o la salubridad o que menoscabaría la integridad estructural, las propiedades funcionales o los atributos sensoriales.
Finalmente, expresa que la irradiación de alimentos sólo se justifica cuando responde a una necesidad tecnológica y/o es beneficiosa para la protección de la salud del consumidor. No deberá utilizarse en sustitución de prácticas adecuadas de higiene o de fabricación o de buenas prácticas agrícolas.
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