Las frutas y verduras son componentes esenciales de una dieta saludable. Y un consumo diario suficiente podría contribuir a la prevención de enfermedades importantes, como las cardiovasculares y algunos cánceres. En general, se calcula que cada año podrían salvarse 1.7 millones de vidas si se aumentara lo suficiente el consumo de frutas y verduras.
Un reciente informe de la OMS y la FAO recomienda como objetivo poblacional la ingesta de un mínimo de 400 gramos diarios de frutas y verduras (excluidas las patatas y otros tubérculos feculentos). Esto para prevenir y mitigar varias carencias de micronutrientes, sobre todo en los países menos desarrollados.
Las frutas y verduras aportan vitaminas y minerales, además de contener agua, fibra y elementos funcionales que contribuyen a mantenerse saludable. Por ejemplo, la vitamina C ayuda a proteger las células de la oxidación, es necesaria para la formación del colágeno y contribuye al correcto funcionamiento del sistema inmune.
El hierro es un mineral necesario para funciones vitales como el transporte de oxígeno en el cuerpo, las fuentes vegetales más representativas son las hojas verdes y las leguminosas que, al combinarse con vitamina C, puede ayudar a mejorar su aprovechamiento.
Consumo de frutas y verduras para mejorar el sistema alimentario
El Manifiesto de Nutrición Sustentable, lanzado por Unilever en 2015 tiene como objetivos:
- Ofrecer soluciones para dietas más saludables
- Fortificar los alimentos para combatir la deficiencia de nutrientes
- Reducir el desperdicio
Esta visión para el mejoramiento del sistema alimentario no solo pretende mejorar la salud de las personas, sino que también está enfocado en proveer soluciones sustentables para reducir el impacto en el planeta a largo plazo.
Por ello Knorr en alianza con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) pretenden desarrollar en conjunto la iniciativa de Los 50 Alimentos del Futuro. A través de la cual se busca reinventar la comida para el año 2025, haciendo pequeños y positivos cambios en los hábitos alimenticios de la población mexicana por medio de una dieta más variada.
La importancia de elegir vegetales, granos, cereales, semillas, legumbres y nueces radica en que los alimentos de origen vegetal son densos en nutrientes, asequibles y atractivos. Aemás, su impacto en el medio ambiente es menor que el de los alimentos de origen animal.
En ese sentido, México cuenta con una gran ventaja para acceder a una alimentación más sana y sustentable. Pues 17 de los alimentos en esta lista se encuentran ampliamente disponibles para su consumo de manera local.
Objetivos del Año Internacional de Frutas y Verduras
2021 fue declarado por la FAO como el Año Internacional de las Frutas y Verduras como un llamamiento a mejorar la producción de alimentos saludables y sostenibles. Mediante la innovación y la tecnología, así como a reducir la pérdida y el desperdicio de alimentos.
Los objetivos son:
- Concienciar sobre los beneficios del consumo de frutas y verduras para la salud y la nutrición y orientar las políticas hacia dichos beneficios.
- Promover dietas y estilos de vida saludables, equilibrados y diversificados mediante el consumo de frutas y verduras.
- Reducir la pérdida y el desperdicio en los sistemas alimentarios de las frutas y verduras.
- Difundir las mejores prácticas sobre:
- Fomento del consumo y la producción sostenible de frutas y verduras en apoyo de los sistemas alimentarios sostenibles.
- Mayor sostenibilidad en el almacenamiento, transporte, comercio, procesamiento, transformación, venta minorista, reducción del desperdicio y reciclaje, así como en las interacciones entre estos procesos;
- Integración de los pequeños agricultores, en especial los agricultores familiares, en las cadenas de producción, suministro y valor locales, regionales y mundiales en aras de la producción y el consumo sostenibles de frutas y verduras, reconocimiento de las contribuciones de las frutas y verduras, incluidas las razas no mejoradas y las variedades del agricultor, a su seguridad alimentaria, nutrición, medios de vida e ingresos;
- Fortalecimiento de la capacidad de todos los países, y en especial de los países en desarrollo, para adoptar enfoques y tecnologías innovadores de la lucha contra la pérdida y el desperdicio de frutas y verduras.