Estos factores sobre la agricultura preocupan a los jóvenes

De manera tradicional, al hablar de la producción de alimentos se relaciona inmediatamente a la agricultura y los trabajadores del campo como los principales y únicos actores.

Actualmente, cada vez más los consumidores levantan la voz para opinar sobre qué tipo de alimentos prefieren, cómo se producen, qué riesgos o beneficios tienen para la salud.

Para las nuevas generaciones es muy importante conocer qué cuidado se tiene hacia el medio ambiente cuando se producen los alimentos, por ello la relación entre agricultores y consumidores es muy estrecha.

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Una de las características de las nuevas generaciones es su preocupación por la sostenibilidad. Hay una consciencia diferente por ver hacia el futuro y conocer el estado en el que las generaciones anteriores están dejando el planeta. Por ello, a través de diferentes canales como las redes sociales se hacen presentes y participan activamente, proponen acciones o cambios que vayan encaminados a proteger el mundo que están heredando.

En ese sentido, la consultora Kantar, a petición de Corteva, realizó un estudio en el que se tomó la opinión a la próxima generación agricultores y consumidores sobre su visión para el futuro de los alimentos y la agricultura y su papel dentro de ella.

El resultado demostró que la próxima generación de agricultores y consumidores entienden la complejidad y el tamaño de los desafíos a los que se está enfrentando la alimentación y la agricultura y son realistas en lo que se refiere a resolver muchos de los mayores problemas.

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Cuatro preocupaciones de los jóvenes sobre la agricultura

Los participantes en el estudio centraron su atención en cuatro principales preocupaciones:

1. Proteger el futuro de la comida

La importancia de proteger la tierra, la salud del suelo, el agua y preservar la biodiversidad de las comunidades es un tema de gran relevancia para todos. Para satisfacer las necesidades de una población que crece a un ritmo acelerado, adopción de prácticas de producción sostenible es una cuestión imprescindible para proteger el futuro del suelo, de los campos y del planeta.

De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), la población mundial superará los 10 mil millones de personas en 2050. Y la demanda de productos agrícolas se incrementará entre un 60 y 70%, por ello es urgente mejorar la sostenibilidad en toda la cadena de suministro de alimentos.

2. Asegurar el Futuro de la agricultura

Los jóvenes están conscientes de que no es posible continuar con una actividad agrícola tradicional. Es momento de innovar y desarrollar nuevas formas de cultivar para afrontar los retos de la agricultura en forma sostenible y transparente hacia los consumidores.

El uso de nuevos productos biológicos, nuevas tecnologías, la digitalización con el uso de robots, sensores de temperatura y humedad, imágenes aéreas y tecnología GPS para que el campo sea más rentable y eficiente. El futuro de la agricultura depende de la innovación sostenible.

3. Escuchar y difundir las opiniones, preocupaciones y compromiso de los agricultores y consumidores

Los participantes del estudio perciben que las principales conversaciones sobre el futuro de la alimentación y la agricultura se concentra en los grandes actores de la cadena de suministro de alimentos, mayoristas y proveedores de insumos agrícolas.

Tanto consumidores como agricultores sienten que actualmente no tienen una participación suficientemente sobre cómo se cultiva, vende y consumen los alimentos y reclaman un lugar en esta conversación.

4. Cómo enfrentar el cambio climático

El cambio climático es un hecho que ya está ocurriendo y es bien conocido para la siguiente generación de agricultores y los consumidores. Ellos están conscientes que los humanos han contribuido a esta situación y que ésta tendrá un impacto negativo en el suministro de alimentos en todo el mundo en los próximos 20 años.

Las nuevas generaciones se preocupan por la integridad del sistema alimentario y están motivadas para protegerlo. Además de trabajadores del campo y consumidores, las empresas también tienen un gran trabajo por hacer.

Finalmente, el estudio concluye que la compañía escucha a todos los actores del campo, entiende las preocupaciones de los jóvenes agricultores. Además, demuestra su compromiso realizando inversiones en investigación y desarrollo para impulsar una agricultura verde con un menor impacto en el clima.

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