La inocuidad alimentaria es un asunto de todos. La inocuidad de los alimentos contribuye a la seguridad alimentaria, la salud de la población, la prosperidad económica, la agricultura, el acceso a los mercados, el turismo y al desarrollo sostenible.
Las Naciones Unidas designaron a dos de sus organismos, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), para liderar los esfuerzos para promover la inocuidad de los alimentos en todo el mundo.
La FAO y la OMS unieron esfuerzos para ayudar a los países a prevenir, gestionar y responder a los riesgos a lo largo de la cadena de suministro de alimentos, trabajando con los productores y vendedores de alimentos, las autoridades reguladoras y las partes interesadas de la sociedad civil, tanto si los alimentos se producen en el país como si se importan.
Datos sobre la inocuidad alimentaria
La FAO y la OMS crearon una nueva guía para explicar cómo todos pueden participar. La guía incluye cinco pasos para lograr cambios de forma sostenida en la inocuidad de los alimentos:
- Garantice la inocuidad: los gobiernos deben garantizar alimentos inocuos y nutritivos para todos.
- Cultive alimentos inocuos: los productores agrícolas y de alimentos tienen que adoptar buenas prácticas.
- Mantenga los alimentos inocuos: los operadores de empresas deben asegurarse de que los alimentos sean transportados, almacenados y procesados de forma inocua.
Dichas entidades entienden la importancia del acceso de todas las personas a alimentos inocuos, nutritivos y suficientes, y que los alimentos inocuos son esenciales para promover la salud y erradicar el hambre, dos de las principales metas de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
La producción de alimentos inocuos apoya la sostenibilidad, al mejorar el acceso a los mercados y la productividad, lo que impulsa el desarrollo económico y la mitigación de la pobreza, en especial en las zonas rurales.
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La salud como tema principal
La falta de higiene de las instalaciones puede contaminar a los alimentos, por lo que, si las prácticas de higiene de desempaque no son adecuadas los productos que se manejen durante la cadena de producción terminaran con algún tipo de contaminación.
Otro tema de posible de vehículos potenciales de contaminación, es el transporte de las frutas y hortalizas. La falta de higiene en el transporte puede contaminar a los alimentos por lo que los jugadores del sector han hecho un esfuerzo para prevenir, para reducir o eliminar los peligros de los alimentos en los ambientes agrícolas.
Dentro del webinar: “Inocuidad alimentaria con un enfoque práctico: impacto en responsabilidad social y medio ambiente”, Miguel Ángel Martínez Téllez, investigador del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD), señaló que al implementar programas de inocuidad en las unidades de producción, se podrá conducir a ver y evaluar una mayor cantidad de oportunidades de mejora que se obtienen en las unidades agrícolas.