La descarbonización es un proceso gradual de disminución de las emisiones de carbono a la atmósfera. Estas emisiones, principalmente de dióxido de carbono, son consecuencia de la actividad humana y la manera en que se produce la energía, así como la ganadería y la agricultura intensivas.
- En la Masterclass Descarbonizando la industria: juntos por una economía responsable, Laura Arias, experta en soluciones de descarbonización para industrias en Veolia, destaca que “es urgente actuar si queremos asegurar las necesidades de las futuras generaciones e implementar soluciones que permitan la transformación ecológica hacia una economía de bajo carbono”.
Es importante subrayar que el uso de energías fósiles es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero producidos por el hombre.
La descarbonización en México
En línea con acuerdos internacionales, México cuenta con la Ley General de Cambio Climático, la cual tiene como objetivo regular las emisiones y de gases y compuestos de efecto invernadero para que México contribuya a lograr la estabilización de sus concentraciones en la atmósfera a un nivel que impida interferencias antropogénicas peligrosas en el sistema climático.
Además, se cuenta con la Norma Oficial Mexicana NOM-163 de la Secretaria de Medio Ambiente y Recurso Naturales la cual establece los parámetros y la metodología para el cálculo de emisiones de dióxido de carbono expresada en gramos de dióxido de carbono por kilogramo y su equivalencia en términos de rendimiento de combustible.
Asimismo, en México existe el Registro Nacional de Emisiones, el cual obliga a diferentes sectores productivos a reportar de forma puntual sus emisiones directas o indirectas de gases de efecto invernadero, cuando sus instalaciones excedan las 25 mil toneladas. Los sectores que tienen esta obligación son:
- energía
- industria
- transporte
- agropecuario
- residuos
- comercio y servicios
Gracias a estos registros se puede saber que el 64% de las emisiones en México provienen del consumo de combustibles fósiles. Por ello, las industrias de distintos sectores tienen la oportunidad de reducir sus emisiones y obtener beneficios productivos.
Cómo se realiza la medición adecuada de las emisiones de GEI o huella de carbono
La huella de carbono de una organización es una medida que evalúa la cantidad total de emisiones de gases efecto invernadero que se emiten directa o indirectamente como resultado de las operaciones de dicha compañía.
La medición de la huella de carbono de una organización se mide en tres alcances conocidos como Alcance 1, Alcance 2 y Alcance 3. Los cuales permiten categorizar las diferentes fuentes de emisiones de una compañía.
Estrategias de descarbonización de las empresas
De acuerdo con Arias, el monitoreo de emisiones, las empresas determinan qué proyectos ejecutar para disminuir sus emisiones de forma estratégica y así iniciar su plan de descarbonización.
La reducción es una de las acciones que debe tomar una empresa como parte de su plan. Por ejemplo, una empresa puede instalar unidades de transformación de lodos procedente de sus aguas residuales y el tratamiento de aguas residuales en energía.
Hay tres estrategias principales para reducir las emisiones derivadas del uso de energía:
- Conservación de energía
- Eficiencia energética
- Descarbonización de las fuentes energéticas
Otra estrategia que pueden aplicar las empresas es la captura de emisiones residuales de gases de efecto invernadero. Los sumideros de carbono tienen como objetivo eliminar CO2 de la atmósfera por medio de dos vías potenciales:
- Naturales
- Tecnológicos
Qué pasa en la industria de alimentos y bebidas
El sector de alimentos y bebidas es uno de los de mayor tamaño a nivel industrial, aproximadamente un tercio de las emisiones globales de gases de efecto invernadero provienen de esta industria.
Ante esto, la empresa Coca-Cola Femsa lleva a cabo un proyecto de trigeneración en su planta de Barranquilla Colombia, donde en los motores que producen electricidad se recupera el calor residual en el proceso.
El calor se recupera con un chiller de absorción y se usa para la producción de vapor para los procesos y darle a la planta un sistema de refrigeración para todos los salones de jarabe y dar al proceso productivo agua refrigerada.
“Con lo anterior, la empresa no solo tuvo mayor eficiencia energética, sino que los costos operativos y de producción se redujeron”, concluye la especialista.