Los sistemas alimentarios están interconectados con respecto a desafíos globales como el hambre, el cambio climático, la pobreza y la desigualdad. Es por ello que la respuesta de todos los jugadores de los sistemas alimentarios a nivel mundial debe estar igualmente unida y caminar hacia un mismo objetivo.
“Es imperativo que nuestros sectores y socios de salud se unan a nosotros para transformar los sistemas alimentarios para las personas desnutridas, en particular las personas mayores, vulnerables y marginadas”, explicó Jessica Fanzo, directora del Programa Mundial de Política y Ética Alimentaria de Johns Hopkins.
En relación a los sistemas de salud y los sistemas alimentarios y de cómo están profundamente interconectados, Lawrence Haddad, director ejecutivo de GAIN y ganador del Premio Mundial de la Alimentación 2018, explicó que: “una buena nutrición es la base de una vida saludable, que a su vez conduce a una vida saludable y comunidades prósperas. Trabajando juntos y combinando nuestro conocimiento, ahora existe una oportunidad real de apoyar la transformación de los sistemas alimentarios, asegurando dietas saludables y nutritivas para todos”.
Sistemas alimentarios sanos, el objetivo de los líderes del sector
Líderes de la Universidad Johns Hopkins, la Alianza Global para la Mejora de la Nutrición (GAIN) y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), unieron fuerzas para expresar un fuerte llamado a la acción para que las comunidades de alimentos y salud trabajen juntas.
José Rosero Moncayo, director de la División de Estadísticas de la FAO, FAO dice: “Sin los actores de la salud mundial no podemos lograr dietas saludables en nuestros platos y tampoco podemos lograr prácticas agrícolas sostenibles”. Agrega: “Es fundamental que trabajemos junto con los actores del sistema de salud para dar forma a comunidades saludables”.
Con la Cumbre de Sistemas Alimentarios de la ONU, la declaración conjunta apunta a una oportunidad real para promover la cooperación entre los sectores de la salud mundial y las partes interesadas y aumentar la investigación y la innovación para obtener alimentos seguros, nutritivos, asequibles y accesibles para todos.
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