Los consumidores no solo son conscientes de la salud inmunológica, también comprenden la conexión entre la salud intestinal y la salud en general. Tener un sistema digestivo saludable juega un papel crucial en la salud en general.
La clave del sistema intestinal es la enorme cantidad de microbios presentes en el colon humano, a menudo denominado microbioma intestinal. Diversos estudios han demostrado que estos microbios intestinales interactúan con su huésped humano de diversas formas.
Una función esencial de los microbios intestinales es la fermentación de fibras dietéticas. Lo que mejora la función intestinal del huésped, la síntesis de vitaminas y mitiga el efecto de bacterias potencialmente dañinas.
El eje intestino-cerebro: punto de contacto para la salud integral
Las fibras dietéticas o los prebióticos influyen cada vez más en las soluciones más allá del intestino. La microbiota mejora la barrera de la pared intestinal y produce ácidos orgánicos que afectan positivamente a todo el cuerpo.
Publicaciones recientes muestran efectos estimulantes de los prebióticos sobre el sistema inmunológico, el metabolismo en relación con la energía y la quema de grasas. Y más recientemente, la salud mental dentro del eje intestino-cerebro.
El microbioma intestinal es un punto de contacto para todos los aspectos de la salud y el bienestar. Durante la última década, ha quedado claro que la salud digestiva, especialmente el microbioma, juega un papel en la salud en general. La mala alimentación y la ingesta insuficiente de fibra se consideran los principales impulsores de un trastorno disfuncional o insalubre.
Mejorar la salud digestiva de forma natural
Los consumidores buscan formas naturales de reforzar su bienestar interior. Pues reconocen los desafíos de un estilo de vida agitado y con limitaciones de tiempo. Por ello, desean productos que puedan ayudar a sus cuerpos.
Las fibras prebióticas, como la inulina de achicoria, ofrecen una forma de fácil acceso. Para que la mayoría de los consumidores mejoren la salud de su microbioma intestinal. La fibra de raíz de achicoria responde a las tendencias del microbioma intestinal de origen vegetal y a la revolución de la reducción (azúcar, grasa, calorías, etcétera), que parecen vincularse positivamente con el bienestar interior.
La fibra de la raíz de achicoria estimula los microbios beneficiosos en todos los individuos y aumenta la producción de ácidos grasos de cadena corta (AGCC) en el intestino. Además, se puede aplicar para mantener una dieta equilibrada que apoye la inmunidad y ayude a las personas sanas a mantenerse saludables.
Te puede interesar: La curcumina y la importancia para el sistema digestivo