Los resultados de un nuevo estudio en el Journal of Nutrition Education and Behavior, destaca que el programa de alfabetización alimentaria Food Sensations for Adults (FSA) de Foodbank Western Australia es efectivo para producir cambios positivos en los hábitos nutricionales en participantes mayores de 18 años.
La recolección de datos ocurrió antes y después del programa de cuatro semanas, con un grupo de control reclutado de voluntarios adultos en un almacén de banco de alimentos en Perth, Australia.
A pesar de su duración relativamente corta, los investigadores encontraron que el programa FSA demostró una efectividad notable en el fomento de un cambio de comportamiento sostenido. De tal forma que se alinea con los hallazgos de programas similares.
"Es posible que los participantes no puedan cambiar rápidamente toda la alfabetización alimentaria y los comportamientos dietéticos. Por lo que los programas que duran más de cinco meses se consideraron los más efectivos", expresa Andrea Begley , autora principal de la investigación.
Resultados duraderos
El estudio incluyó a 128 participantes del grupo de control que completaron el cuestionario previo al programa y 80 que completaron el cuestionario posterior al programa. Y estos datos se compararon con las respuestas de los participantes del programa FSA.
Según los investigadores, se observaron mejoras notables en el grupo de control emparejado.
La planificación y el manejo de las comidas mejoraron en un promedio de 12.4% y el consumo de verduras aumentó en un 22.6%. Mientras que el consumo de fruta también aumentó a entre 0.3 y 1.6 tazas diarias.
Los participantes del grupo de control también informaron una mayor confianza en la cocina y un aumento del 5.7% en su confianza. Esto con respecto a la selección de los alimentos adecuados.
Este estudio subraya el valor de las iniciativas de alfabetización alimentaria como el programa FSA para influir positivamente en los hábitos alimenticios y mejorar la alfabetización alimentaria general.
"Con el estudio, se contribuyen a mejores resultados de salud y un menor riesgo de enfermedades crónicas entre los participantes adultos", comenta Begley.
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El programa de alfabetización alimentaria
El programa FSA consta de cuatro sesiones de 150 minutos. Cada sesión comienza con actividades interactivas de educación nutricional, que cubren temas como pautas dietéticas, control de porciones y planificación de comidas. La cuarta sesión permite a los participantes elegir un tema.
Después del componente educativo, los participantes desarrollan habilidades prácticas de cocina y seguridad alimentaria, seguidas de probar y compartir la comida preparada. Además, el programa enfatiza la incorporación de verduras en las comidas y refrigerios.
Además, los investigadores destacan que el programa FSA fue diseñado en base a modelos de alfabetización alimentaria y teorías de cambio de comportamiento. Se entrega tanto en persona como en línea.
Finalmente, los diseñadores del programa utilizan adaptaciones para la entrega web con el objetivo de ser accesibles para aquellos con bajos niveles de alfabetización. Principalmente utilizando recursos pictóricos.
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