La soya es una proteína completa y de alta calidad, que es comparable con las de animales, como las de carne, leche y huevo.
Además, es una fuente importante de proteína en la dieta porque puede ayudar a niños y adultos a satisfacer adecuadamente sus necesidades de estos aminoácidos.
La proteína de soya es especial por ser la única fuente completa, nutricionalmente hablando, de proteína vegetal disponible.
Podría considerarse el macronutriente más importante para los humanos. Los roles de la misma en el cuerpo humano son numerosos. Funciona como enzima, hormona, transportador, receptor y es parte de la integridad estructural de la mayoría de los órganos en el cuerpo.
Con tantos roles importantes en todos los aspectos de las funciones corporales, es esencial que los humanos consuman suficientes proteínas de alta calidad diariamente para satisfacer las demandas de su cuerpo.
Propiedades de la soya
La calidad de las mismas es una medida de la biodisponibilidad y su evaluación es una medida para determinar la capacidad de las proteínas en alimentos y dietas para satisfacer las demandas metabólicas de aminoácidos y nitrógeno.
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (ONUAA, o más conocida como FAO) y la Organización Mundial de la Salud (WHO) en el Informe de Evaluación de Calidad de Proteínas para la Consulta de Expertos Conjuntos recomiendan la calificación de aminoácidos corregida/digerible de proteínas (PDCAAS), que es un procedimiento simple, científico y racional para evaluar la calidad de éstas.
La metodología de PDCAAS toma en consideración tres parámetros importantes:
1. El perfil de aminoácidos esenciales en las proteínas de los alimentos.
2. La corrección por su digestibilidad.
3. Su capacidad para proporcionar los requerimientos de aminoácidos de FAO/WHO para niños de 2 a 5 años.
Aunque hay diferencias relativamente pequeñas en los requerimientos de aminoácidos para los grupos de edad-sexo más allá de la infancia, los requerimientos para niños de 2 a 5 años se utilizaron debido a que es un patrón de mayor demanda de cualquier grupo de edad, excluyendo el de los requerimientos de infantes.
Para una proteína determinada, el aminoácido esencial es el que está presente en una cantidad relativamente más baja comparada con el estándar que se utiliza para el cálculo del valor final PDCAAS. La calificación más alta posible utilizando el método PDCAAS es de 100%. La proteína de soya alcanza la calificación de 100%.
La digestibilidad de las proteínas se define como la proporción ingerida que es absorbida por el cuerpo. La digestibilidad real de las proteínas se corrige con el valor de nitrógeno fecal endógeno (medido como pérdida de nitrógeno que ocurre en una dieta libre de proteínas) y se expresa como un porcentaje de digestibilidad real.
La digestibilidad real de las proteínas aisladas de soya es de 97% (datos internos) y es comparable a otras proteínas de alta calidad como la leche, carne y huevo que van de 94 a 97%. Otras proteínas vegetales son de menor digestibilidad.
Método PER
El método PER (Proporción de Eficiencia de Proteínas, por sus siglas en inglés) evalúa la calidad de las proteínas. Todavía es utilizado por algunas personas y consiste en medir la capacidad de una proteína para contribuir al crecimiento de ratas jóvenes. Este método sobreestima el valor de algunas proteínas animales y subestima el valor de proteínas vegetales para el crecimiento de humanos.
Por otro lado, PDCAAS considera la contribución total de las proteínas vegetales para la dieta. Además, las proteínas vegetales como la de soya son de alta calidad y tienen ventajas económicas y sustentables cuando se comparan con proteínas animales.
En algún momento la proteína de soya se calificó como nutricionalmente inferior a las animales. Se argumentó que el azufre que contiene la metionina de los aminoácidos es limitante en la de soya.
Bioensayos
Los bioensayos en animales con PER sugieren que el valor biológico de la proteína de soya es solamente de 62 a 92% comparado con la de la caseína. Sin embargo, los ensayos en animales subestiman los valores biológicos debido a que las ratas tienen requerimientos mayores de metionina que los humanos, por lo que no se pueden utilizar estas técnicas para estimar exactamente la calidad de la proteína de soya para humanos.
Los datos inequívocos generados durante los últimos 25 años han demostrado que la proteína de soya es nutricionalmente completa, basada en su espectro de aminoácidos esenciales. Numerosos estudios de balance de nitrógeno han demostrado que la proteína pura de soya, cuando se administra en cantidades adecuadas en humanos, es comparable en calidad con la de la carne, leche y otras proteínas animales.
Estos estudios de balance de nitrógeno proporcionan evidencia clara y consistente de que la proteína aislada de soya es una proteína completa que puede cumplir con los requerimientos para la nutrición necesaria de niños y adultos.