El desafío real de inseguridad alimentaria está en comunidades rurales muy alejadas, donde el acceso a los alimentos es extremadamente limitado, explicó María Cisneros, directora de la Fundación CMR
Estas comunidades, algunas de las cuales se han visto afectadas por fenómenos como sequías prolongadas, enfrentan serios problemas para acceder a productos alimenticios básicos.
La falta de infraestructura, la escasa presencia de servicios de salud y la distancia de centros urbanos dificultan aún más la situación, particularmente, de los niños en estas zonas, quienes generalmente dependen de comedores comunitarios como el único acceso a comida suficiente y nutritiva.
“Hay niños que están en inseguridad alimentaria, no saben si van a comer el día de mañana”, aseguró la directora de la Fundación CMR. “La realidad es que para muchos de estos niños, la comida que les damos en los comedores es la única que recibirán en todo el día. Si no garantizamos que esta comida sea completa, corren el riesgo de caer en desnutrición o sufrir problemas de salud como la anemia”, alertó.
Por ello, dijo que su objetivo es apoyar a la infancia en seguridad alimentaria para que además de alimentarlos, se garantice una alimentación equilibrada.
Limita las oportunidades futuras
Uno de los enfoques de la Fundación es la primera infancia, es decir, el periodo crítico de desarrollo que va de los 0 a los 6 años de edad.
Hay estudios que han demostrado que si un niño sufre desnutrición en esta etapa temprana, su cerebro no se desarrolla de manera adecuada, lo que afecta su capacidad intelectual y, a largo plazo, sus oportunidades de vida, recalcó la entrevistada.
Agregó que la desnutrición en la infancia tiene efectos profundos y duraderos, no solo en el desarrollo cognitivo del niño, sino también en su capacidad para acceder a mejores oportunidades laborales en el futuro.
María Cisneros resaltó que además de proporcionar alimentos, la Fundación CMR promueve el acceso a una alimentación digna, un derecho fundamental para todos los seres humanos.
En sus comedores comunitarios, la organización se ha comprometido a proporcionar una comida al día, que cubra al menos el 60% de la ingesta diaria recomendada de nutrientes para cada niño, con el fin de prevenir la desnutrición y problemas de salud como la anemia.
"Lo primero que hacemos es asegurarnos de que los niños tengan comida, pero no solo eso; nos aseguramos de que esta comida esté equilibrada y sea nutricionalmente adecuada. Sabemos que en muchos casos, esa será la única comida que reciban durante el día", explicó un portavoz de la Fundación CMR.
La organización cree firmemente que todos los niños, independientemente de su situación económica o geográfica, deben tener acceso a una nutrición adecuada, que no solo les permita sobrevivir, sino prosperar.
"Sabemos que si logramos darles una buena nutrición desde el inicio, podemos ayudarles a romper el ciclo de pobreza que a menudo les limita en su desarrollo y oportunidades futuras. No queremos solo alimentar a un niño o adolescente, sino invertir en su futuro desde sus primeros años de vida", explicó la directora de la Fundación CMR.
Otras iniciativas
Entonces platicó sobre otros proyectos que apoyan, como es la nutrición materna, ya que la alimentación de las madres durante el embarazo y la lactancia garantizarán que los bebés nazcan con un peso adecuado y un buen nivel de salud.
Un ejemplo es la iniciativa implementada en Chiapas, donde se apoyó a una comunidad indígena que enfrentaba graves problemas de inseguridad alimentaria.
En este caso, la Fundación proporcionó leche y fórmula a madres y recién nacidos, además de establecer un comedor para mujeres embarazadas, asegurando que los futuros bebés recibieran una nutrición adecuada desde antes de su nacimiento.
La Fundación CMR atiende a más de 13 mil niños en todo México. Como parte de su estrategia para evaluar y mejorar el estado nutricional de los menores realiza pruebas periódicas de hemoglobina, peso y talla, con el fin de detectar posibles casos de anemia o desnutrición grave.
Estos exámenes permiten a la Fundación identificar problemas de salud y actuar de manera preventiva o correctiva, asegurándose de que los niños mejoren su nutrición a lo largo del tiempo.
“Lo que buscamos es que los niños estén mejorando progresivamente su estado de salud, y aunque los resultados no se ven de un día para otro, trabajamos con proyectos a mediano y largo plazo para lograr cambios significativos", comentó Cisneros.
Inversión social
La Fundación CMR tiene dos estrategias para su inversión social. La primera se basa en proyectos de inversión a largo plazo, en los cuales apoya a fundaciones con un acompañamiento continuo y sostenible.
Algunas de estas fundaciones llevan más de diez años recibiendo apoyo, lo que ha permitido establecer relaciones de confianza y obtener resultados duraderos.
La segunda estrategia es su Convocatoria Anual del Día Mundial de la Nutrición, que brinda financiamiento puntual para proyectos de nutrición que se desarrollan a lo largo de un año, ofreciendo el impulso necesario para que las fundaciones puedan implementar sus iniciativas.
A través de estas dos iniciativas, la Fundación CMR ha logrado que las organizaciones beneficiarias cuenten con más recursos para sus proyectos.
Sin embargo, la Fundación destaca que su trabajo no solo se limita a entregar recursos financieros, sino también a fortalecer las capacidades de las organizaciones.
Uno de los espacios más importantes para este fortalecimiento es el Congreso de Nutrición Infantil, que la Fundación organiza anualmente.
Fundación CMR, continúa su labor en favor de una nutrición adecuada y equilibrada para miles de niños en diversas regiones de México a través de su apoyo a nueve fundaciones en todo el país, de las cuales cinco están ubicadas en comunidades indígenas.
El modelo de alimentación implementado en las nueve fundaciones que apoya la Fundación CMR se adapta a las características locales, utilizando los ingredientes disponibles en cada comunidad para ofrecer menús nutritivos que varían de acuerdo con las costumbres y recursos de la región.
Un llamado a la acción
María Cisneros dijo que el recurso económico sigue siendo una de las principales limitaciones para las organizaciones. Por ello, la Fundación CMR se enfoca en conseguir fondos, través de sus programas de recaudación de fondos y asociaciones con empresas, para poder llevar alimento a aquellos niños y familias que enfrentan inseguridad alimentaria y desnutrición.
En el 2023 recaudó más de 50 millones de pesos y para este 2024, Fundación CMR tiene altas expectativas de seguir superando sus objetivos de recaudación.
"Para este año, nuestra meta es seguir aumentando la recaudación, y también estamos explorando nuevas formas de inversión social", explicó la directiva.
En línea con esta visión, la Fundación planea lanzar proyectos de emprendimiento social, como una manera de diversificar y fortalecer su enfoque a largo plazo.
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