La fortificación de alimentos es el proceso de agregar o aumentar micronutrientes a los alimentos comunes para ayudar a reemplazar los nutrientes perdidos en el proceso de cocción. O para proporcionar un refuerzo de nutrientes en los alimentos que son deficientes en nutrientes.
Además, puede desempeñar un papel integral en el apoyo a la nutrición de quienes la necesitan desesperadamente o de aquellos que siguen dietas restrictivas.
Los nutrientes más comunes utilizados en la fortificación son:
- Vitaminas A y B
- Hierro
- Zinc
- Ácido fólico
Todo esto apoya un cuerpo sano y puede ayudar a las personas a evitar deficiencias de nutrientes. La desnutrición es una grave condición que afecta a millones de personas en todo el mundo. Aquellos en riesgo de desnutrición son vulnerables a una serie de problemas de salud.
La fortificación de los alimentos todavía se considera una estrategia central para corregir y prevenir la escasez de ingesta de nutrientes en todo el mundo.
Tendencia plant based
La demanda de fortificación de proteínas a base de plantas continúa ganando terreno debido a la creciente base de consumidores de quienes adoptan una dieta "flexitariana" por razones de salud y sostenibilidad.
Para Mindy Leveille, Gerente de marketing estratégico de proteínas en Kerry, muchas fuentes de proteínas no están completas. “Lo que significa que carecen de algunos de los nueve aminoácidos esenciales que nuestro cuerpo necesita”.
Agregó que al reconocer esta oportunidad, vemos que muchos consumidores clientes buscan hacer afirmaciones que incluyen:
- Contiene los nueve aminoácidos esenciales
- Una fuente completa de proteínas en las etiquetas de los productos
Un ejemplo es ProDiem Complete, una proteína vegetal vegana de Kerry que combina proteína de guisante y arroz para respaldar un perfil completo de aminoácidos similar al huevo o la proteína láctea.
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El potencial de la fortificación
Dado que la reformulación de alimentos y bebidas toca tanto las áreas que enriquecen y salvan vidas, todavía hay mucho por explorar en el sector.
Aunque la tendencia de reformulación y fortificación va viento en popa, la industria aún tiene que alcanzar su máximo potencial. Después de todo, es un proceso desafiante sustituir ingredientes o agregar nutrientes a las recetas.
Cada ingrediente que se elimina necesita ser reemplazado por un componente con funcionalidades similares en términos de sabor y textura. Agregar nutrientes a las fórmulas, sin comprometer las propiedades sensoriales de los alimentos y bebidas, es igual de complejo.
Aun así, las oportunidades parecen ilimitadas. Hay más de 300 mil especies en el reino vegetal, pero hasta la fecha solo se ha examinado una pequeña fracción de los fitonutrientes de las plantas.
Se estima que los productos lácteos y de proteínas vegetales híbridos abordarán las demandas flexitaristas de reducir el consumo de proteína animal. Los ejemplos de aplicación van desde sopas hasta galletas y yogur.