El movimiento wellness impulsa una vida holística, es decir, que contemple todos los aspectos de una persona para su bienestar integral. Por eso, hoy los servicios y productos deben ofrecer nuevas experiencias de consumo que brinden bienestar holístico.
El bienestar no es una moda, es algo que todos queremos: una vida tranquila, saludable y armónica. En este sentido, las experiencias de consumo van desde una alimentación que genere placer hasta el buen turismo para descansar y disfrutar.
Los consumidores ya no buscan productos para satisfacer necesidades solamente. Actualmente el consumo refleja el proyecto de vida de las personas, sus valores y fuentes de gratificación y bienestar.
Experiencias de consumo, la base para conquistar al consumidor
Son cuatro los aspectos emocionales en las cuales los consumidores buscan satisfacer sus necesidades:
- Cuidado personal, que cobra mayor relevancia a medida que se acelera la vida cotidiana con un exceso de trabajo y actividades. La salud, alimentación saludable, centros de bienestar y productos de cuidado personal, serían las respuestas de consumo.
- Búsqueda de nuevas experiencias, privilegiando la sensación de aventura y la superación de los límites de la rutina. La proliferación del turismo local y los deportes extremos son evidencias de esa búsqueda.
- Encontrar, construir, mantener y profundizar relaciones interpersonales, incluyendo parejas, amistades y familia. En términos de consumo, la exploración de este campo se manifiesta en momentos o experiencias memorables al compartir comidas, regalos, viajes sociales, entre otros.
- Demostrar el éxito y expresar los valores personales, así como la individualidad. Las marcas deben innovar en opciones más personalizadas y ligados a la salud y el bienestar, lo cual se convierte en reforzadores para generar experiencias de consumo.
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¿Cómo encontrar el equilibrio en tiempos de pandemia?
Uno de los factores de cambio más poderosos en la industria de alimentos y bebidas es el incremento de la preocupación de los consumidores por su salud debido a la pandemia actual por Covid-19.
Aunado a ello, cada vez más estudios científicos demuestran que felicidad, alimentación y salud están estrechamente relacionados. Es evidente que llevar una vida sana contribuye a que la actitud sea más positiva.
Hablando de la búsqueda de la felicidad y el equilibrio emocional, de la alimentación, del ejercicio físico y otras actividades que sean del agrado de cada persona, ¿qué otros factores influyen para alcanzar el bienestar?
Un ejemplo de confort que brinda ese bienestar que el individuo desea es El Roble Resort. “Se trata de un espacio ubicado en Santa Clara de Juárez, Estado de México, que cuenta con 90 mil metros cuadrados de extensión y 7,500 metros cuadrados de construcción”, declara Jesús Meza, Director de Marketing del complejo.
“El Roble Resort, que se construyó en 2004, anuncia su inauguración y gradual reactivación de actividades al abrir sus puertas para el descanso y experiencias memorables en beneficio del consumidor”, añade.
Alineado con la tendencia por el cuidado de la salud y el bienestar, El Roble Resort brinda:
- La posibilidad de gozar de los beneficios en la creciente tendencia del home, room y hotel office.
- Actividades al aire libre, confort y calidad. Según estudios, la aventura es la segunda opción después de la playa.
- Un enfoque natural que permite redescubrir el bienestar físico, mental y espiritual.
Productos locales para vivir experiencias de consumo
Los alimentos naturales y saludables son otro aspecto que están marcando tendencia, donde en un mundo global, resalta la importancia de consumir productos locales para ayudar al cuidado del medio ambiente, a la economía de la región, al crecimiento de pequeños productores y al consumo de productos de estación.
Más que con factores como precio, peso y medida, el consumo local seduce con vivencias y experiencias de consumo (sabor tradicional, ambiente, detalles), las cuales generan un vínculo emocional entre consumidores y productos o servicios.
En este contexto, El Roble Resort permite disfrutar de la cocina de alta especialidad gastronómica mexicana con ingredientes y sabores característicos de la localidad, que incluyen: el tradicional mole campechano (verde y rojo), birria de res y barbacoa preparada en hoyo con pencas de maguey, vinos, quesos y cerveza artesanal.
El consumo local toma fuerza, por ello las empresas, de alimentos o no, deben adaptar su oferta para responder a las necesidades y gustos de los consumidores sin perder el toque tradicional. Esto les permitirá conectar con el fuerte deseo de las nuevas generaciones de obtener placer en la comida.
Si se toma como base la salud o bienestar holístico que toma en cuenta todos los aspectos que brindan felicidad, hablando en específico de la industria de alimentos, representa una oportunidad, ya que a su vez que puede desarrollar productos e innovar en el consumo local para brindar bienestar, también puede coadyudar a impulsar estilos de vida saludables y holísticos.
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