Las exportaciones de alimentos chilenos con destino a la Unión Europea crecieron en un 42% en el transcurso de los últimos cinco años. Pasaron de ventas por un monto de US$ 1.618 millones en el año 2006 a US$ 2.304 millones en 2010.

Del total de los alimentos exportado por el país sudamericano a la UE, un 34% corresponde a fruta (fresca, congelada y deshidratada), seguido por el vino (29%) y los productos del mar (16%).

Las exportaciones totales de alimentos y bebidas de Chile han mostrado un aumento sostenido durante los últimos 10 años. A excepción de la baja producida el 2009 debido a la crisis financiera internacional, se registra una tasa de crecimiento de 137% entre el 2000 y 2010 con exportaciones totales por un valor cercano a US$ 11.700 millones el año 2010.

La meta chilena, para la que se realiza un intenso trabajo público-privado, es posicionarse entre los 10 principales países exportadores de alimentos del mundo, con envíos anuales que podrían llegar a los US$ 20.000 millones en el año 2015.

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La expectativa: aumentar las exportaciones de alimentos chilenos

En este marco, Chile tiene la expectativa de seguir incrementando sus exportaciones de productos alimenticios a la Unión Europea.

"Tenemos claro que debemos esforzarnos mucho para lograr la excelencia en la producción de alimentos, diversificando nuestros productos, llevando adelante una producción sustentable ambientalmente, que genere una oferta inocua, con inversiones en tecnología agropecuaria y con el entrenamiento de una fuerza laboral que desarrolle cadenas de valor rentables, bien integradas entre la producción y los mercados finales", expresó recientemente el embajador de Chile en Alemania, Jorge O'Ryan.

Así lo expresó en uno de los eventos organizados por la delegación del país en ANUGA 2011, una de las ferias de alimentos más importantes del mundo que se realiza cada dos años en la ciudad de Colonia, Alemania, y que en 2011 contó con la presencia de alrededor de 40 empresas chilenas.

En Europa cada día crece más la preocupación por los temas ambientales, la salud de las personas, la inocuidad de los alimentos y la innovación. En este último aspecto el Embajador O'Ryan, destacó que "hemos ha hecho una alianza estratégica con Alemania para la instalación en Chile del primer centro de la sociedad Fraunhofer en América Latina, que proyectará al país como plataforma de innovación en la región".

Uno de los focos de trabajo de Fraunhofer Chile Research Center for Systems Biotechnology será precisamente la agroindustria.

La Unión Europea, importante consumidor

La Unión Europea representa para Chile el segundo destino de sus exportaciones totales. Antonio Domínguez, Director de Chilealimentos ve también una buena proyección en Europa para la exportación de alimentos chilenos.

"Pensaba que en ANUGA encontraría a clientes muy pesimistas por la situación económica en el continente, que no querrían comprar, o tomar decisiones de largo plazo, sin embargo, la percepción que me formo en estos días es que seguirán comprando, de modo que veo un buen futuro para nuestros envíos", expresa al hacer un balance de las gestiones realizadas.

En su opinión, la industria alimentaria chilena ha ido ganando en competitividad, lo cual permite hoy al sector llegar en mejores condiciones frente a los productores europeos.

Para Andrés Rodríguez, Presidente Ejecutivo de Chilean Walnut y Vicepresidente Ejecutivo de Chilean Dried Plums, el Acuerdo de Asociación Económica entre Chile y la Unión Europea, ha sido uno de los elementos facilitadores de las exportaciones chilenas al bloque.

"La cercanía de Chile tanto en condiciones arancelarias como en cuanto a confianza entre sus economías, se ha traspasado al exportador-importador, generando lazos comerciales muy fuertes y cada vez más fructíferos", precisa.

Las exigencias europeas

Fuentes de ProChile, la agencia de promoción de exportaciones del gobierno chileno, plantean que seguirán trabajando en áreas de creciente demanda en Europa como los alimentos funcionales, orgánicos y en productos que cuenten con la certificación halal, kosher o el sello vinculado al comercio justo.

En relación a la preocupación ambiental de los mercados, en términos de distancia la lejanía a los centros de distribución, hoy no es una limitante que afecte la huella del carbono de las exportaciones de alimentos chilenos, pues las emisiones de gases efecto invernadero relacionadas al transporte de los productos de Chile, es sustancialmente más baja que la encontrada en bienes producidos y comercializados en Europa, debido principalmente a que el 90% de las exportaciones de Chile van vía marítima, cuya eficiencia es 3.2 veces mayor al transporte terrestre utilizado dentro de Europa y Estados Unidos.

Análisis del mercado europeo

En el año 2010, las exportaciones totales chilenas a los países miembros de la Unión Europea, alcanzaron los US$ 12.226 millones, lo que significó un crecimiento de 25% en relación al año anterior. En cuanto a las importaciones desde la UE, en el mismo período éstas fueron de US$ 7.561 millones. El Intercambio Comercial ascendió a US$ 19.787.

Durante el 2010, las exportaciones chilenas hacia Unión Europea se vieron principalmente concentradas en el sector manufacturas, con una participación del 54%, seguido por Sector Minerales (15%); Alimentos Agropecuarios (10%); Industria Forestal (8%); Vinos (6%) y finalmente se encuentra Alimentos Mar (3%) y Otros y Servicios (2)%. Durante el primer semestre del 2011, las exportaciones chilenas a la UE fueron de US$ 8.010 millones.