El escenario del comercio alimentario internacional cambió de un comercio internacional administrado, con los acuerdos comerciales como referencia, a un comercio ultra administrado, en donde existen mayores barreras sanitarias y ambientales.
Esto implica mayores desafíos para el comercio alimentario internacional porque existe una fuerte tendencia global de favorecer la producción y el consumo locales. Asimismo, experimenta la ruptura de las cadenas de valor globales, la cuales son sustituidas por cadenas regionales.
Durante su participación en la Jornada de alimentos: Nuevos escenarios, organizada por la Red alimentaria de Tecnofidta, Gustavo Idígoras, Presidente de la Cámara Argentina de la Industria Aceitera y Centro de Exportadores de Cereales, destacó que Argentina debe desarrollar una estrategia para afianzar el comercio alimentario post Covid-19 para vincularse a los aliados estratégicos dentro y fuera del Mercosur.
Contexto del comercio alimentario internacional
El nuevo contexto internacional está caracterizado por dos variables: la alta incertidumbre y alto nivel de desorden. Ambas variables están afectando el potencial del comercio internacional.
El sector de alimentos y agropecuario está teniendo consecuencias directas, con la caída de los precios internacionales, principalmente el maíz, afectado por el precio del petróleo y el uso menor de los biocombustibles.
Los fenómenos que afectan el comercio alimentario internacional son:
- La limitada relación con China
- El aislamiento territorial
- La caída de los precios del petróleo
- Un mayor proteccionismo comercial
- La recesión mundial
- Cadenas globales de valor quebradas
- Las bioenergías poco viables
- Demanda estancada
Los organismos internacionales estiman caídas del Producto Interno Bruto (PIB) en promedio de 8% para países desarrollados, y para los países en desarrollo podrían superar el 10%.
En ese sentido las cadenas globales de valor que se estaban conformando y consolidando se encuentran resquebrajadas, con serias dificultades para manejar la cadena de suministros globales.
Variables en los acuerdos de comercio internacional
El escenario cambió de un comercio internacional administrado, con los acuerdos comerciales como referencia, a un comercio ultra administrado, donde se visualizan cuatro grandes variables:
- Mayores barreras sanitarias y ambientales. Las restricciones de ingreso de productos importados, tanto de bienes como de servicios, son un desafío para el comercio internacional de alimentos.
- Se observa una tendencia internacional de favorecer la producción y el consumo locales.
- La forma de administrar la pandemia tendrá efectos directos, y probablemente divida a los países entre aquellos que administran bien, por lo tanto, considerados confiables, favoreciendo el comercio con ellos, de aquellos países no confiables.
- Las cadenas globales en un mundo ultra administrado tendrán mayores problemas para mantenerse y actuar de la misma forma que lo hacían en la última década.
Definir el comercio exterior alimentario
Esta situación de comercio ultra administrado también está vinculada con la guerra comercial y tecnológica entre las dos grandes potencias del mundo: China y Estados Unidos. Claramente a esto se suma una nueva variable: la sanitaria.
Ahora hay que empezar a pensar en tres aspectos:
- comerciales
- tecnológicos
- sanitarios
En este contexto, se verán efectos directos en la re conformación de alianzas y litigios internacionales y se dará una reconstitución de las cadenas de valor globales en los sectores de tecnologías digitales, medicamentos y alimentos. La forma en la cual los países puedan ser parte de estas cadenas globales bipolares será estratégica y podrá definir el futuro del comercio internacional de alimentos y bioenergías de los países de la región.