A más de ocho meses de que el mundo quedó en confinamiento a causa del coronavirus, los nuevos tendencias de consumo comienzan a consolidarse.
En esta nueva normalidad, la tecnología cobra un papel protagónico en el proceso de compra con el objetivo de aumentar la seguridad y acelerar las transacciones. En este sentido, Juan José Llorente, country manager de Adyen en España y Portugal, enumera cinco tendencias de consumo para la era postcovid:
1. Reforzar los e-commerce para agilizar los pagos y la gestión de pedidos: El cierre de las tiendas durante los tres meses de confinamiento ha puesto de manifiesto la importancia de valorar todos los aspectos de un e-commerce. Aquellas marcas que tienen intención de crecer en los próximos meses deberán asegurarse de que su comercio sea lo más rápido, sencillo y eficaz posible.
Ya no es suficiente con que las páginas web tengan un buen diseño y ofrezcan una buena experiencia de compra durante el proceso de checkout, sino que es igualmente importante optimizar el proceso de envío y trabajar con proveedores especializados en la gestión de pedidos para asegurar que el envío y las devoluciones funcionen sin complicaciones.
2. De la tienda al plato en un clic: El sector de alimentación, y más concretamente las cadenas de supermercados, fueron uno de los retailers con más carga de trabajo durante los meses de confinamiento. Sin embargo, tampoco pudieron escapar a los temores de compra en tienda física, que conllevaron un aumento en las compras online de comestibles, prácticamente triplicando el volumen de la industria online de alimentación de la noche a la mañana.
Este cambio de canal ha permitido a muchos consumidores descubrir las ventajas de pagar a otra persona para que haga la compra por ellos, haciendo muy probable que muchas de ellas sigan pagando a los Instacarts y Shipts para realizar sus compras en supermercados. Aunque en el sector predomina actualmente la contratación de servicios de entrega a domicilio, cada vez es más usual que los grandes supermercados ofrezcan a sus consumidores programas de compra en tienda física y entrega a domicilio o simplemente un programa de servicio completamente online.
3. Los pagos serán contactless: El pago sin contacto o contactless en una de las grandes alternativas en esta nueva normalidad. Conscientes de ello, muchos retailers ya han implementado alternativas como los e-wallets, Apple Pay o las tarjetas de crédito contactless y es de esperar que otros sigan esta tendencia.
4. Tecnología checkout-free: El Checkout Free permite a los clientes realizar su compra sin tener que pasar caja para realizar el pago. La tecnología de la compañía se encarga de ir actualizando la lista de la compra de manera virtual conforme el consumidor va escogiendo los artículos que desea comprar en la tienda física, de manera que el cliente únicamente debe escoger y salir de la tienda. En ese mismo instante, en el que se abandona el comercio, la empresa realiza el cobro de los artículos de manera virtual y envía el ticket de la compra a la aplicación del consumidor.
Aunque todavía no está muy extendida, está llamada a ser una de las tendencias del futuro del retail, ya que podría ser muy efectiva de cara a garantizar la seguridad de los consumidores al evitar el contacto directo con el personal de la tienda y la transmisión a través del efectivo o del pago con tarjetas de crédito.
5. Reparto sin contacto: El delivery o comida a domicilio se había consagrado como una de las grandes tendencias de consumo de los últimos años. Por eso no sorprende que haya jugado un papel importante durante la pandemia y que las empresas se hayan visto obligadas a incorporar nuevas medidas para garantizar la seguridad de sus clientes y empleados.
Antes de la crisis por la Covid-19, Walmart ya había puesto en marcha la 'recogida en la acera', convirtiéndose en ese momento en una de las opciones más populares, pero ha sido el coronavirus el que ha obligado a popularizarla entre muchos de los comercios, facilitando así que se mantengan las distancias de seguridad recomendadas entre el repartidor y el cliente.